La huelga de basuras de Valencia, un desafío al Ayuntamiento

Unas setecientas toneladas de basuras se acumulan en las calles de Valencia por la huelga de los barrenderos, que se niegan a realizar el servicio mientras su empresa no les haga entrega de la última paga.La empresa concesionaria, Fomento de Obras y Construcciones (FOC), alega que no puede hacer frente a este desembolso mientras no reciba los setecientos millones de pesetas que le adeuda el Ayuntamiento en concepto de certificaciones de trabajos realizados durante los tres últimos años.

Además de la paga pendiente, los dos centenares de barrenderos que integran la plantilla reclaman un tercio de la diferencia del convecino, que ha sido todavía entregado por la dirección de FOC. Pero el origen laboral del conflicto, que tras infructuosas negociaciones saltó a la calle el pasado lunes, ha quedado desdibujado al utilizarse para situar entre la espada y la pared al Ayuntamiento.

Las relaciones de la concesionaria con el Ayuntamiento se encuentran en una fase de readaptación, ya que el actual plan deja sin limpieza a setecientas calles de un total de 3.500, e igualmente la Corporación está arbitrando un sistema más adecuado para control del rendimiento de trabajo.