Hanoi acepta el principio de una conferencia internacional

El embajador de Vietnam ante las Naciones Unidas en Ginebra, Vo Anh Tuan, desmintió ayer, en una rueda de prensa, algunas denuncias, en el sentido de que su Gobierno exige ciertas cantidades de dinero para autorizar la salida de ciudadanos vietnamitas del país. Admitió, sin embargo, que esa irregularidad era posible «entre ciertos funcionarios no responsables, de baja cualificación».Vo Anh Tuan aseguró que el número de vietnamitas que se seguían refugiando tendía a disminuir, pero no dio cifras al respecto. Por otra parte, confirmó que su Gobierno aceptaba el principio de una conferencia internacional sobre el problema de los refugiados, para examinar la aplicación del acuerdo concluido el 30 de mayo en Hanoi con el Alto Comisariado para los Refugiados de las Naciones Unidas (HCR).

Dicho programa prevé que se dé visado de salida con carácter de urgencia a los ciudadanos que deseen establecerse en el extranjero «para unirse a sus familiares, o por otros motivos de carácter humanitario». La selección de esas personas -según el mismo programa- se deberá hacer sobre la base de listas confeccionadas por el Gobierno de Hanoi y los países de acogida. Todos los otros casos deberán ser examinados por el HCR, para ser discutidos con el Gobierno vietnamita y las autoridades de los países de acogida.

El embajador Vo Anh Tuan culpó de esta situación al «imperialismo norteamericano », y particularmente al «expansionismo de Pekín», que considera todavía a Vietnam como territorio chino ocupado, afirmó el diplomático.

Acusaciones similares fueron lanzadas ayer por el diario Pravda, órgano del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética.

Mientras, tanto, continúan las negociaciones para definir el fondo la forma de una conferencia internacional sobre los refugiados, cuya primera propuesta partió de la jefa del Gobierno británico, Margareth Thatcher. Los vietnamitas temen que esta reunión se transforme en un tribunal contra ellos.