Mauritania, favorable al diálogo con Argelia sobre el Sahara

Las gestiones internacionales tendentes a establecer una línea negociadora de paz en el Sahara occidental cobraron ayer un nuevo impulso con unas declaraciones efectuadas por los ministros de Asuntos Exteriores y de Educación de Mauritania, en favor del diálogo con Argelia, y también con una entrevista mantenida por el presidente francés, Giscard d' Estaing, con el presidente de Costa de Marfil, Houphoue-Boigny, quien manifestó que es necesario «buscar la paz» en el territorio mediante un acuerdo entre Marruecos, Mauritania, el Frente Polisario y Argelia.

Según se indica en medios diplomáticos europeos, el presidente de Costa de Marfil se ha constituido en uno de los «mediadores» en el conflicto del Sahara. Durante un viaje «privado» que ha iniciado recientemente por varias capitales del continente, Houphoue-Boigny ha mantenido entrevistas con representantes de los países involucrados en el problema.Ayer, tras su conversación con Giscard d'Estaing, declaró que espera «haber obrado en forma útil para abrir el camino de la paz en el Sahara».

Según nuestro corresponsal interino en París, Jaime Mercader, Costa de Marfil está actuando como mediadora para obtener la realización de una conferencia de la que participarían representantes de Marruecos, Mauritania, el Frente Polisario y la República Arabe Saharaui Democrática (RASD).

Anteayer, Abdelaziz Buteflika, ministro argelino de Asuntos Exteriores, también fue recibido por Giscard d'Estaing. Buteflika dijo después que actualmente no existe en la cuestión del Sahara «ningún problema insoluble»

Posición negociadora de Mauritania

El ministro mauritano de Asuntos Exteriores, Cheikhna Mohamed Laghdaf, se mostró ayer satisfecho de la «evolución del espíritu de Argelia» en relación con el Sahara. «Tomamos nota -expresó en Nuakehott- de la disposición de Argelia a iniciar una acción pacificadora en el territorio. Mauritania, con su aliada Marruecos, se pronunció siempre en favor de la puesta en marcha de una dinámica de paz.»

Laghdaf aprobó también las gestiones de Francia y los «buenos oficios» de Costa de Marfil en ese sentido.

Paralelamente, el ministro de Educación de Mauritania, Feck Mame n'Tiack, declaró en Bruselas que su Gobierno desea negociar con Argelia. En una entrevista con el diario belga La Libre Belgique, el ministro dijo también que el cambio de régimen en su país «representa por sí mismo un desbloqueo de la situación en el Sahara».

N'Tiack se negó a revelar, «por razones estratégicas», las concesiones que Mauritania está dispuesta a hacer al Frente Polisario, pero anunció que Nuakchott dispone ya de un plan de negociaciones. «Pedimos a nuestros hermanos, que ayer eran enemigos, -subrayó- que se reúnan en torno de una mesa para discutir. Así encontraremos una solución acorde con las realidades actuales.»

El ministro sugirió, sin embargo, que el Polisario no será admitido en las negociaciones iniciales. «Ese problema -indicó- podría ser examinado posteriormente. Por ahora no nos pronunciamos sobre el problema del Polisario.» N'Tiack aseguró, finalmente, que «el proceso de paz está ya en curso».

España ha iniciado también, por ahora en forma muy reservada, una serie de gestiones en favor de la nueva línea negociadora de Francia, Mauritania, Argelia y el Frente Polisario sobre el conflicto del Sahara. Ayer, el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, mantuvo una entrevista con el presidente de la Asamblea Nacional de Costa de Marfil, señor Philippe Yace.

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