El Ayuntamiento de Bilbao multiplica sus deudas

A unos meses de su defunción, el último Ayuntamiento «orgánico» de Bilbao ha decidido emprender abiertamente la carrera del endeudamiento. En un pleno celebrado ayer aprobó un plan de servicios por un montante que roza los 2.000 millones de pesetas. Si se suma esto al déficit actual, estimado en unos 1.500 millones, tenemos una Corporación al borde de la bancarrota, con problemas, a veces, para hacer frente a su nómina. Lo cierto es que la futura Corporación democrática no va a poder reparar una alcantarilla en bastantes años si no se detiene el creciente endeudamiento.

Del plan aprobado ayer, el capítulo de urbanizaciones se llevó setecientos millones de pesetas, seguido del de obras especiales (382) y limpieza (150). Del presupuesto total, tan sólo 351 millones podrán conseguirse en virtud de contribuciones especiales y subvenciones estatales. El resto (1.600) tendrá que ir, una vez más, al capítulo de los créditos.

Tal vez a los partidos les quede la esperanza de que este plan especial, se lo lleve el viento, como se llevo hace meses el proyecto de barrios, que un concejal sacó ayer a colación para manifestar que si no se había llevado adelante era tan, sólo porque los empleados municipales trabajan menos de lo que debieran. El alcalde contestó a esto que su aplazamiento era debido únicamente a dificultades económicas. Lo que no explicó fue que en ese atolladero puede paralizarse también este otro plan de obras.