Incidentes en Tenerife tras un motín de presos comunes

Un total de ochenta presos, entre ellos tres políticos, ocuparon la terraza de la prisión provincial de Santa Cruz de Tenerife después de provocar grandes destrozos en las instalaciones, incendiando algunas dependencias. En la azotea enarbolaron una bandera tricolor canaria, al tiempo que daban gritos separatistas y pedían ser puestos en libertad.

Los hechos tuvieron lugar por la tarde y al poco rato de iniciarse el mitin grupos de manifestantes se agruparon en torno a la prisión enfrentándose a las fuerzas del orden público que tuvieron que intervenir en diversas ocasiones, mientras los presos, desde la azotea, pedían libertad a gritos. Una gran hoguera se podía ver desde las azoteas colindantes; la habían hecho los amotinados quemando colchones, su ropa y útiles personales. Entre los manifestantes de la calle se encontraban también grupos de personas y familiares de los presos que unían sus voces a las de los manifestantes.Miembros de la Guardia Civil les instaron a desalojar el lugar. Los manifestantes así lo hicieron, dirigiéndoles insultos. Posteriormente, a las once de la noche, llegaron las fuerzas antidisturbios de la Policía Armada, que dispararon balas de goma. Los amotinados ya estaban más tranquilos, pero arreciaron de nuevo con sus gritos contra la policía mientras diversos grupos se resistían a abandonar el lugar y en el interior de la prisión se volvían a escuchar disparos de balas de goma.

Cargas de la policía

En la calle, a través de un megáfono se oían gritos de Canarias libre, mientras los presos gritaban desde la azotea. Asimismo se oyeron también voces de no estamos aplatanados, expresión que utiliza el isleño para demostrar que está en pie de guerra. En la esquina que desemboca en la avenida de los Reyes Católicos un grupo de quince a veinte jóvenes intentaron levantar barricadas hasta que también intervino la policía, produciéndose varias cargas.

El delegado especial de la Dirección General de Seguridad, Eutimiano del Prado, dialogó con un representante de los presos. Al finalizar, el delegado hizo las siguientes declaraciones a los medios informativos canarios: «Se ha producido un motín en la prisión provincial animado por unos tres o cuatro presos a los que se les sumaron otros ochenta. En su acción causaron destrozos en el economato, enfermería y otras dependencias. Prendieron fuego que fue sofocado por los bomberos e incluso se sacó a uno de los presos que se quedó en el sitio del incendio acordonado. A esta hora, once cuarenta y cinco, ya están reducidos y la mayoría se han entregado. El incendio ha afectado también al cuarto de oficiales.» El señor De Prado Andrés no precisó las causas que habían producido el motín.

Tras los sucesos de la prisión, unos grupos de incontrolados volvieron a producir incidentes en diversas zonas de la ciudad. En el barrio de Somosierra quemaron dos guaguas y en el polígono de los Gladiolos ardieron dos automóviles particulares.