Sobrio panorama económico para Israel

El Gobierno israelí ha presentado al Parlamento un presupuesto de 35.000 millones de dólares que va a encontrar grandes dificultades para que pueda ser aprobado, ya que es un reflejo de la inflación y recesión económica que atraviesa el país. Según las estadísticas oficiales, la inflación en Israel ha, alcanzado el 25% durante el pasado año, aunque en medios bancarios consideran que puede llegar al 34%.El aumento del producto nacional bruto va a aumentar el 1,2%, una cifra muy baja que se repite por cuarto año consecutivo. Mientras tanto, el índice de desempleo alcanza ya la cota del 5% que hay que considerar como bastante elevada para Israel, un país que se caracterizaba por cifras más reducidas de paro.

La mayor asignación presupuestaria recae en el apartado de gastos militares y defensa, que representa el 35% del producto nacional bruto. Estos gastos ascienden a 300.000 millones de pesetas, pero en términos reales suponen una ligera disminución, cosa que se produce por primera vez en la historia de Israel. El presupuesto ha aumentado en términos absolutos, pero teniendo en cuenta la tasa de inflación se opera una reducción del 8%.

El Gobierno israelí se ha propuesto, por otro lado, reducir en el presente ejercicio el déficit de la balanza de pagos en 800 millones de dólares. Se estima que para 1977 el citado déficit puede alcanzar los 3.300 millones de dólares. La presentación del presupuesto ante el Parlamento ha corrido a cargo del ministro de Finanzas, Yehoshua Rabinowitz.