Un esperado LP de Soledad Bravo

Un esperado LP de producción española de Soledad Bravo sale al mercado, y de él, lo primero que hay que subrayar es el valor de haber arropado adecuadamente su voz y sus cualidades interpretativas. En este sentido, la prudencia en los arreglos y la economía de medios se convierten en un piropo a la orientación del LP desde el primer momento en que fue concebido. Si de Soledad Bravo va hay una adecuada imagen en el país no se puede decir lo mismo de su repercusión discográfica, pero creernos que este LP puede salvar ese inconveniente. Soledad tiene madera de estrella aunque su rigor en la selección temática personal no estimen ese tipo de unciones populares. Soledad reúne las condiciones para ello porque tiene una voz extraordinariamente diferenciada y que le permite expresar y matizar con unas infinitesimales. Domina su instrumento y la fidelidad a la afinación no envara el contenido de sus interpretaciones. El sonido de su voz, que hace pensar en ocasiones en el seco estallido de un Paco Ibáñez, se endulza o araña a niveles que a éste le están prohibidos por falta de expresividad.Si en los ternas que abren ambas caras encontramos una lúcida emoción lineal que la lleva en su honestidad a valorar el texto con un minucioso respeto, la Soledad Bravo que arrastra, se descubre y se entrega es la que termina ambas caras con los temas de Silvio Rodríguez: Sueño con serpientes y Mariposas