Propuesta soviética de desarme

El diario Pravda, órgano oficial del Partido Comunista de la URSS, comentaba ayer que la Unión Soviética hará todo lo posible para llegar a un acuerdo con los Estados Unidos respecto a la limitación de armas nucleares estratégicas.El artículo subraya que el fin de la carrera de armamentos es el objetivo principal de la política exterior soviética, y la URSS pondrá el máximo empeño en finalizar tal carrera.

«La carrera de armamentos -dice Pravda- consume grandes cantidades de dinero y de recursos materiales que, aplicados a fines pacíficos, mejorarían las condiciones de la vida humana en forma considerable».

El artículo de Pravda se publica pocas fechas después de que el nuevo ministro de Defensa, Dimitri Ustinov, dijese en las conmemoraciones del XXXI aniversario de la victoria que la Unión Soviética estaba empeñada en una carrera de desarme, pero que el imperialismo seguía siendo una amenaza y frente a él las Fuerzas Armadas de la URSS debían estar preparadas.

Sin duda, el largo editorial del órgano informativo del PCUS recoge los puntos de vista oficiales, que es tanto como decir los puntos de vista de Leónidas Breznev, que asumió el pasado día 8 un mayor control dentro de los mandos militares soviéticos al ser ascendido a mariscal.

Asimismo, la mención de Pravda a los gastos económicos de armamento parece una clara alusión a las dificultades por las que pasa la economía soviética, y que podría agravarse si se iniciase una nueva carrera armamentística entre las dos superpotencias.

De esta forma, el artículo insiste

en que la URSS está dispuesta a

firmar tratados internacionales comprometiéndose a terminar con las pruebas nucleares, a destruir las armas químicas y a prohibir cualquier nuevo sistema de armamento capaz de provocar destrucciones masivas.

Los intentos soviéticos de nuevos acuerdos llegan tras un enfriamiento gradual entre USA y URSS, primero por la contienda de Angola y después por la campaña electoral norteamericana, que han originado un estancamiento en las conversaciones SALT de Ginebra (sobre armamento estratégico) al no dar contestación Washington a una serie de propuestas que Moscú envió a los norteamericanos en el mes de marzo.