Arabia Saudí retira su candidatura para el Mundial de 2030

A España, Portugal y Marruecos se les ha despejado el camino para organizar el Mundial de 2030 tras la decisión de Arabia Saudí de retirar su candidatura, ya avanzada por este periódico cuando los marroquís se sumaron a españoles y portugueses y Ucrania quedó relegada por los problemas del presidente de su federación con la justicia. La propuesta de los saudíes, que era conjunta con Grecia y Egipto para convertirse en la primera Copa del Mundo que se disputará en tres continentes a la vez (Asia-Europa-África), ha terminado por sucumbir a una triple alianza que con la inclusión de Marruecos dividió el voto africano. Arabia Saudí tenía intención de pagar las infraestructuras a griegos y egipcios, pero ha terminado por desistir. Así lo ha aclarado el Ministro de Exteriores saudí, Faisal bin Farhan Al Saud, que en las últimas horas ha contactado con sus compañeros de viaje para expresarles que desisten y que no presentarán su candidatura ante la pujanza del proyecto que lidera la federación española junto con la portuguesa y la marroquí. Esta triple candidatura es la gran favorita ante la de Uruguay, Argentina, Chile y Paraguay. La gran carta a jugar por esta es la mística de la celebración del centenario del primer Mundial disputado en 1930 en Uruguay, pero en términos organizativos está muy por detrás de la de España, Portugal y Marruecos.

Hace unos meses, el gobierno saudí aclaraba su voluntad de recibir el Mundial gracias a un plan de “creación de oportunidades de calidad y un entorno atractivo para la inversión en el sector deportivo para conseguir una economía deportiva sostenible, elevando el nivel de profesionalización y gobernanza administrativa y financiera en los clubes deportivos, además de elevar el nivel de los clubes y desarrollando su infraestructura para brindar los mejores servicios a los seguidores del deporte”. Entre otros objetivos estaba llevar a la liga saudí entre las 10 mejores competiciones del mundo, cosa que focalizaron tras la llegada de Cristiano Ronaldo (Al-Nassr). Ahora lo ha hecho Benzema y Kanté (Al-Ittihad). Querían convertir estos fichajes en el mejor reclamo y propaganda mundialista. De hecho, el príncipe heredero de Arabia Saudí y primer ministro, Mohamed bin Salmán, anunciaron un plan nacional de desarrollo del deporte, especialmente el fútbol, y donde cuatro de sus clubes (Al-Hilal, Al-Nassr, Al-Ittihad y Al-Ahli) pertenecerán en un 75% al fondo de inversión público. O, lo que es lo mismo, tendrán un presupuesto mastodóntico para fichar. Pero, comprenden, todavía no es suficiente para vencer la carrera para albergar un Mundial.

Una vez estudiado en detalle las posibilidades reales, Arabia Saudí ha concluido que no podrá imponerse a la candidatura de España-Portugal-Marruecos, pues entiende que les lleva mucha ventaja tras años de trabajo. Punto a favor para la estrategia diplomática de la Federación Española de Fútbol liderada por el presidente Luis Rubiales. A finales de 2024 se conocerá el ganador. La sede será designada mediante el voto de todas las federaciones que componen la FIFA (211) en la primavera de 2024.

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