El Baskonia vuelve a la vida

Hace dos semanas el Baskonia estaba desahuciado, con ninguna opción de meterse entre los ocho primeros, pero la decisión de la Euroliga de anular definitivamente todos los resultados de los equipos rusos le abrió otra ventana para poder colarse. Tal vez mínima, pero los vitorianos se dieron cuenta de que el corazón seguía latiendo. Después de tres victorias consecutivas, contaba con la última oportunidad, y la aprovechó al máximo. Venció al Fenerbahçe, sumó su cuarto triunfo consecutivo y vuelve a creer.

Salió entonado el equipo de Spahija, tal vez espoleado por esa opción. Ante un rival de cuidado, que también se juega la clasificación, anotó sus cinco primeros lanzamientos de tres puntos y en esa fortaleza se apoyó el Baskonia durante los diez primeros minutos, porque apenas lanzó de dos. El Fenerbahce parecía dejar hacer en el tiro exterior a los vitorianos, que también estuvieron acertados en los rebotes ofensivos. Pese a todo, el equipo turco no se dejó ir y acabó el primer cuarto sólo un punto por debajo.

Sin embargo, para desesperación de Spahija, que pedía otra forma de jugar, lanzamientos más fáciles, el porcentaje de triples en el segundo cuarto cayó en picado. El Fenerbahçe se entonó un tanto, tomó el mando del partido y alcanzó diferencias muy peligrosas (30-38), con Guduric controlando la situación en la cancha y De Colo inspirado, aunque el francés, con molestias, no jugó prácticamente en la segunda parte, y a los suyos les pesó su ausencia.

Ese fue un dato a favor del Baskonia, que apretó en el segundo tiempo como si no hubiera un mañana. El equipo vitoriano recuperó a Baldwin, que fue claramente de menos a más; a mucho más. El líder azulgrana se hinchó a jugar, apoyado en un entonado Fontecchio, en un  Peters convertido en vendaval, la altura de Enoch, el mejor en la nube, y la aportación del joven Kurucs, poco utilizado durante la temporada, pero que realiza un trabajo defensivo monumental.

El Baskonia bloqueó el juego turco. El equipo gualdinegro se vino abajo con una contundencia inesperada. No les salió nada, mientras los vitorianos se hinchaban a correr, a robar y a llevarse rebotes debajo de los dos aros (38 por 30). La ventaja fue en aumento según pasaban los minutos, porque el Baskonia no aflojó en su intensidad, mientras que el Fenerbahçe dio por perdido el partido mucho antes del final. El regreso a Vitoria de Polonara y Henry no fue demasiado agradable, Ambos vieron como su anterior equipo se mete de nuevo en la pelea.

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