Verdasco y Ferrer, en octavos

“Fight (pelea)”, se lee en la camiseta que Fernando Verdasco se pone después de llegar a sus primeros octavos en un grande desde 2011 (6-2, 6-4 y 6-4 a Gulbis). El madrileño, que se medirá a De Schepper, el número 80, para alcanzar los cuartos de un torneo del Grand Slam por primera vez desde 2010, intenta reconstruir en Londres el juego que le llevó a ser el número siete. Por ahora, el número 54 se impone de saque en saque: es el segundo tenista con más aces (42) de los que quedan en la cita y solo ha cedido un par de veces el servicio.

“Esto es muy importante para mí, porque lo he pasado francamente mal en los últimos meses”, reconoció a sus 29 años. “Han sido meses duros, de intentarlo siempre y de que siempre me quedara sin conseguir una cuarta ronda o unos cuartos”, siguió el madrileño, que en cinco de los últimos seis grandes se inclinó en partidos a cinco sets. “No quiero ponerme más presión, pero sé que este es el único grande en el que no he hecho cuartos, el único en el que no he jugado en la central, el grande en el que me he quedado más a las puertas”, razonó. “Tengo una buena oportunidad”.

En la lucha por los cuartos le acompañará David Ferrer, que remontó 6-7, 7-6, 2-6, 6-1 y 6-2 a Dolgopolov pese a jugar con un tobillo infiltrado. Él no llevaba la camiseta de Verdasco, pero sí compartió la misma filosofía. “Luché”, resumió el número cuatro, que jugará contra el croata Dodig.