Valor doble

Los 200 mariposa y los 400 estilos son las pruebas más duras que hay. Mucho más que el 1.500. ¿Y quién le ganó a Mireia? Jiao Liuyang. Una china. Considerando el nivel de la natación china en estos Juegos, diría que el valor de la plata es doble. Si los chinos no hubieran estado al cien por cien Mireia sería campeona olímpica frente a todas las potencias históricas, como Japón, Estados Unidos, Australia y Hungría. Todos los que hemos nadado, y sobre todo los que hemos competido en España, sentimos una satisfacción especial. En ciento diez años de olimpismo no había habido ocasión de que una española hiciera lo que hizo esta chica de Badalona. Mi hermana, que nadó hasta los 14 años, me llamó emocionada, nada más enterarse: "¿Lo has visto?". La plata de Mireia la sentimos como propia. 

Los nadadores son más predecibles. Las chicas tienen subidas y bajadas. Pueden tener un día fantástico y otro por los suelos. Esto le pasó a Mireia en Londres antes de nadar los 200 mariposa. Me hizo recordar al día que Sergi López ganó el bronce en Seúl. Con la medalla de David López Zubero en Moscú han sido los tres días más memorables de la historia de la natación española. Con un matiz: en Moscú, por el boicot, por la guerra fría, no estaban todos los mejores.

Mireia debe nadar unos 12.000 metros diarios. Únicamente así se puede competir como ella lo hace

Mireia fue muy valiente y, a pesar de que los últimos 15 metros se le hicieron más largos de la cuenta, llegó entera. Como decimos nosotros: 'No la cogió el pulpo'. No se clavó, ahogado por el dolor, que es lo que le suele suceder a tantos mariposistas en la segunda parte de las carreras de 100 o de 200. Es ahí en donde se notó que ha hecho los deberes en los entrenamientos. Es imposible acabar a ese ritmo los 200 mariposa si no has nadado muchos metros cada día. Mireia debe pasar ampliamente de los 12.000 diarios en dos sesiones. Sólo así se puede competir como ella lo está haciendo en las pruebas de estilo y de fondo.