Mourinho: "No fui a provocar al Villarreal, sino a celebrar el gol con mi hijo"

José Mourinho volvió a pecar de provocador, o al menos eso interpretaron en el banquillo del Villarreal, que vio cómo el técnico festejaba el cuarto gol de su equipo delante de ellos y con evidentes gestos de alegría dirigidos a las gradas. Tras el incidente CANI fue expulsado al tirarle una botella de agua al portugués por interpretar que se estaba mofando de ellos. Poco después, con los ánimos más templados y con la victoria en el bolsillo, Mourinho compareció en rueda de prensa asegurando que su intención no era otra que celebrar el tanto con su hijo, que según el entrenador estaba sentado justo detrás del banquillo visitante.

"El incidente es consecuencia de un estado de cosas en el que todo lo que hago es siempre negativo. En este momento estamos así", se ha lamentado el técnico madridista. "Ante el Levante (en la Copa del Rey) hice un cambio que tenía preparado hace tres días y fui insultado. En este momento debo pedir permiso a mis adversarios para hacer los cambios. Hoy, juro por mi hijo que he ido a celebrar el gol con él que está siempre detrás del equipo visitante", ha añadido.

El portugués ha reconocido que dio esa misma explicación a los integrantes del banquillo del Villarreal. "He ido a celebrarlo con mi hijo, que tiene el abono tras el banquillo visitante, y los jugadores del Villarreal pensaron que estaba de cachondeo para provocar. Espero que cuando uno jura por su hijo, como mínimo le crean. Soy un padre loco por sus hijos y no jugaría más si no fuera verdad", ha insistido.

"Todo lo que hago yo siempre tiene una interpretación negativa. No puedo hacer nada. Se lo he dicho al banquillo del Villarreal. Si no me quieren creer es problema suyo. Me gustan mis hijos y juro que lo celebré con mi hijo", ha intentado zanjar.