Situación límite para España

Cuando Fernando Verdasco sale derrotado 6-7, 6-4, 6-3 y 7-6 de la bella pista del Zenith, sometido por el arriesgado juego de Michaël Llodra, España se encuentra frente a un grave problema: la derrota del madrileño, unida a la de David Ferrer contra Gael Monfils (7-6, 6-2, 4-6, 5-7 y 6-4), deja a la selección 2-0, a un punto de la derrota en los cuartos de final de la Copa Davis que le enfrentan contra Francia y sabiendo que el margen para la remontada es mínimo. Desde que existe el Grupo Mundial (1981) solo ocho veces un equipo consiguió voltear el marcador de 2-0 encajado en la primera jornada.

España, doble defensora del título e invicta desde 2007, se encuentra ante un escenario desconocido en tiempos recientes y que requerirá mañana en el dobles de una actuación memorable: Verdasco y Feliciano López se enfrentan a Llodra y Benneteau, una pareja excelente para la pista rápida y de bote bajo del Zenith, por encima de cualquier tipo de estadística. Los franceses se adaptan con naturalidad al juego de saque y volea que privilegia esta pista, tablas de madera con apenas unas capas de pintura. Los españoles, dos zurdos de tremendo saque, perdieron la última vez que se enfrentaron a una situación semejante: contra los hermanos Bryan en los cuartos disputados en Wiston Salem, Estados Unidos, en 2007.

Francia, un equipo lleno de tenistas ciclotímicos, que tan pronto arrollan como se diluyen, está ante su gran oportunidad. España, frente a una oportunidad única: solo la victoria le vale para seguir con vida.