Los Bucks fuerzan el séptimo partido ante los 76ers en la final de la Conferencia Este (110-99)

Ser la pareja de baile de Los Ángeles Lakers en la final de la NBA está bastante caro. Philadelphia 76ers, que esta noche podría haber sentenciado su eliminatoria en Milwaukee, ha caído estrepitosamente ante los Bucks, que ya sueñan con vencer en la final de la Conferencia Este.

Los de George Karl han tratado de humillar al equipo de Larry Brown desde el primer cuarto, y han alcanzado diferencias superiores a los 30 puntos en algunas fases del encuentro. Al final, la reaparición de Iverson, escondido durante casi todo el partido, ha evitado que el escándalo saltase al marcador.

Los de Milwaukee comenzaron fuertes, consiguiendo una ventaja de 10 puntos al final del primer asalto. Ray Allen (41 puntos al final del encuentro) asumía su papel anotador y Scott Williams se apuntaba al festival de tiro de los Bucks. Al descanso, la diferencia era ya de 29 puntos (60-31).

Tras alejarse por 36 puntos en el marcador durante el tercer cuarto, los Bucks se relajaron. Tenían razones para hacerlo, ya que nadie pensaba en una reacción de los de Philadelphia. Pero, estando Allen Iverson (46 puntos en su haber) por medio, la lógica no tiene sentido.

El líder de los 76ers ejerció como tal en el último cuarto y, sacando a relucir su mejor baloncesto, colocó a su equipo a tan sólo 10 puntos de la victoria. No pudo. Ahora su equipo tendrá que jugarse a una sola carta el pase a la final de la competición con el miedo que da el verse apaleado por su rival en la Conferencia Este.

Del séptimo partido de la eliminatoria, que se disputará en Philadelphia, saldrá el rival de O'Neal y Bryant en la lucha por el anillo. Bucks y 76ers siguen con las espadas en alto.