Flamenco para un poeta

Federico García Lorca fue un gran entendido del arte andaluz que contribuyó a su difusión y expansión. Y el pueblo gitano se siente muy identificado con él porque siempre lo entendió y defendió. Lo reflejó en obras como Romancero gitano o Poema del cante jondo. Ahí está su pasión por el cante flamenco, por sus formas y sus intérpretes, por la guitarra, el grito, el silencio, el ¡ay!, el baile...

Federico fue un gran aficionado. A ello contribuyó haber nacido y vivido en Granada, el gran templo del arte gitano. Al mismo tiempo, como era muy sensible, siempre defendió en sus poemas y música a las clases sociales marginadas. Se identificaba con los oprimidos y las causas perdidas, tenía mucha humanidad.

Federico buscaba en sus obras encontrarse a sí mismo, y el flamenco le ayudaba a conseguirlo; hizo definiciones poéticas sobre la soleá y la seguidilla, le gustaban el piano y la guitarra. Él admiraba este mundo oscuro, tenebroso y trágico y así lo recrea en sus textos. Lo suyo fue un conocimiento poético de este arte. Sus poesías flamencas se difundieron gracias a los recitadores, como Gabriela Ortega, quien nos dejó en sus grabaciones el mensaje de Lorca desde la época en que estaba prohibido por la dictadura, también el mítico Camarón de la Isla, admirador suyo.

Creo sinceramente que este gran poeta fue de mucha ayuda para dar a conocer el arte flamenco andaluz; tal vez por eso más tarde el género le ha rendido tantos homenajes. Para mí, es un placer haber podido trabajar en este disco, me gustaría dar las gracias a todas las personas que han realizado un trabajo maravilloso y a Javier Limón, por haber confiado en mí.

Juan Carmona (Madrid, 1987) es el productor de Lorca Vivo.