Gutiérrez Aragón: "Paul Auster es un narrador nato"

Un nuevo libro de Paul Auster siempre es un acontecimiento en España, donde su persona es recibida de una forma casi siempre reservada a los artistas de cine. Esta vez, el despliegue mediático no es por una novela del pródigo escritor de Brooklyn, sino por unas tempranas memorias: Diario de Invierno (Anagrama 2012) El relato que hace de si mismo en segunda persona es propicio a la confesión y al autocastigo, pero Auster lo es más en cualquiera de sus novelas que tuteándose a si mismo. La narración es sencilla, directa, y con el estilo adictivo propio de su autor, que hace que te enganches siempre, cuente lo que cuente. Hay narradores natos, como esas personas desconocidas que de pronto escuchas en un tren contando algo trivial y cuyas palabras te atrapan. Estoy de acuerdo con Rodríguez Rivero - otro adicto al de Brooklyn- en lo abrupto de algunos finales de Paul Auster. Esta vez el que el final quede en el aire está justificado. El autor piensa seguir viviendo su propia escritura.