Los trabajadores del Zoo acusan a Colau de querer cerrar el parque

Los trabajadores del Zoo de Barcelona se concentraron a mediodía de ayer en las puertas del parque para denunciar la muerte “agónica” de la instalación y mostrar su temor de que cierre. Los empleados temen que el plan del gobierno de Ada Colau en el Ayuntamiento de la capital catalana, que apuesta por una iniciativa animalista (Zoo XXI) que cuestiona la moralidad de los parques zoológicos actuales, los aboque al cierre. El comité de empresa denunció que el Consistorio no está teniendo en cuenta la opinión de los trabajadores ni de una parte importante de los patronos de la Fundación del Zoo.

Los representantes de los trabajadores del Zoo de Barcelona acusaron a la teniente de alcalde de Ecología, Janet Sanz, de suspender el pasado miércoles una reunión de la fundación para evitar que la entidad aprobara el nuevo modelo del parque.

Según el comité de empresa, Sanz quiere añadir a tal documento gran parte de la iniciativa animalista Zoo XXI, que limita la reproducción de animales a solo once especies diferentes. Una iniciativa que, según el comité, supone “la muerte de la instalación lentamente”, su cierre y el fin de los puestos de trabajo de los empleados. Además, los miembros del comité aseguran que la elección de las especies no es coherente porque muchas de ellas “no están en peligro de extinción”. Los empleados, además, aseguran que el Plan Estratégico elaborado los últimos años tiene un “consenso amplio” entre los patronos.

Por su parte, el comisionado de Ecología del Ayuntamiento, Frederic Ximeno, negó que el Consistorio pretenda cerrar el Zoo ni salir de las entidades internacionales con las que colabora en la conservación e investigación de animales. “El gobierno municipal cree que debe y puede encontrar un espacio de encuentro” entre las posiciones de los animalistas de la iniciativa Zoo XXI y los patronos y trabajadores que apoyan el Plan Estratégico.