Condenado a 23 años de cárcel por matar y descuartizar a su pareja en Calella

Un hombre ha sido condenado a 23 años de cárcel por matar a su pareja asfixiándola en un hotel de Calella en julio de 2015. El agresor, además, descuartizó el cadáver para poder sacar el cuerpo de la habitación en maletas. Tras recoger el veredicto de culpabilidad del jurado popular, la Audiencia de Barcelona ha fijado la pena de cárcel y una indemnización total de 525.000 euros para los tres hijos de la mujer; uno de ellos fruto de su relación con el agresor.

Los hechos ocurrieron en julio de 2015. La pareja regresó de un viaje a Suecia y se desplazó a Caella para pasar allí unos días. La noche del 9 de julio, la pareja salió a una discoteca de la zona y, al volver al hotel, el acusado golpeó en la cara y en la cabeza a la víctima, tras lo que le tapó la boca y la nariz para impedir que respirara. Le causó la muerte por sofocación. El acusado negó los hechos en el juicio: afirmó que ambos pelearon y que, durante el forcejeo, la mujer tropezó y se dio un golpe en la cabeza que la mató.

El acusado reconoció, sin embargo, haber comprado cuchillos para descuartizar el cadáver y poder transportarlo en dos maletas y una bolsa. Dos días más tarde, se halló una maleta que contenía el tronco y las extremidades superiores de la mujer y se inició una investigación que culminó con el descubrimiento de las otras partes del cuerpo. Los restos han permitido determinar la causas de la muerte y han demostrado que la mujer había fallecido por asfixia y no por un supuesto golpe.

Cuando el acusado fue detenido, disponía del billete para marcharse de forma inmediata a Estocolmo. Tenía previsto irse el día anterior, pero perdió el vuelo.