Bilbao saluda a la Aste Nagusia con ofrendas florales y autos de choque

La Aste Nagusia no comenzará de manera oficial hasta el sábado a las siete de la tarde, pero Bilbao ha comenzado este jueves a teñirse ayer de fiestas. El alcalde Ibon Areso y concejales de todos los grupos municipales han aprovechado la tradicional ofrenda a la Virgen de Begoña en la basílica, un día antes de su festividad, para inaugurar el recinto ferial de barracas y enfrentarse, por una vez lejos del Ayuntamiento en plena pista de autos de choque.

Areso, que celebrará su primera Aste Nagusia como alcalde investido tras la muerte de Iñaki Azkuna, quiso transmitir el deseo de que toda la ciudadanía se divierta en las fiestas, antes de asistir a una demostración con payasos y malabaristas del clásico Gran Circo Mundial. La visita terminó con la activación de todas las atracciones.

"La única duda que nos cabe es algo que la corporación municipal no controla: el tiempo", ha avisado el alcalde, que se ha congratulado porque este año no ha habido "ninguna polémica", al contrario que en ediciones anteriores, por la guerra de las banderas, la elección de la txupinera o las fotos de los presos en las txosnas. Su única esperanza es que la ciudadanía lo pase "estupendamente bien" y que la hostelería "respire un poquitín".

Las fiestas de Bilbao son, para el alcalde, "plurales, con txosnas, goitiberas, comparsas", y actos para otra gente que "prefiere otras cosas más tranquilas, hoteles, toros, teatro", ha resaltado.