“En la campaña todos tenemos que ir juntos”, dicen en Álava

Los dirigentes políticos e institucionales del PP alavés se afanan por asegurar que “con el paso del tiempo se van posando los ánimos” y que la inmediatez de la campaña del Parlamento Europeo “obliga” a “ir juntos” porque la suerte electoral “afecta a todos”. En cambio, quienes siguen de cerca el día a día del partido constatan que existe “desconfianza” entre la nueva dirección y el núcleo duro de la organización territorial alavesa. “Quiroga demostró que no tenía confianza con Oyarzábal y lo que ahora ocurre es que hay desconfianza en Álava con ella”, señala una fuente interna.

Los dirigentes más cualificados del PP alavés acudieron en bloque el pasado domingo al acto de precampaña celebrado en Bilbao en torno a la presencia del cabeza de lista europea, el exministro Miguel Arias Cañete. “Las campañas electorales unen mucho porque todos tenemos que remar y en el fondo es una responsabilidad de todos”, admite un cargo alavés de la dirección regional.

Pero las relaciones entre Quiroga y Alfonso Alonso, convulsionadas hasta el extremo durante el tormentoso congreso de San Sebastián, distan mucho de las mantenidas por el presidente del PP alavés con Basagoiti. “Tienen una relación correcta, sin más”, señalan desde dentro de la formación popular. “Con Basagoiti era mucho más estrecha y diaria”, remarca.

Ante los nuevos retos que aguardan al PP en el ámbito vasco, las dos partes en conflicto durante el congreso parecen conjuradas a evitar “discrepancias”. No obstante, desde el sector alavés se admite que procurarán disponer de “un perfil propio” ante las próximas elecciones locales y forales de 2015, donde defienden su gestión en los gobiernos del Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación de Álava.

Desde la dirección regional prefieren ahora mismo centrarse en la campaña europea, conscientes de que no podrán evitar una interpretación directa hacia su gestión de los resultados que el PP obtenga en Euskadi, el primer resultado con la actual presidenta.

Sin embargo, en Álava tomarán cuerpo los efectos de la línea política que imprima Quiroga a su mandato, habida cuenta de la amenaza para repetir mandato que suponen las relaciones con el PNV y el PSE-EE. “Ahora mismo no sabemos si queremos distanciarnos o no del PNV y las relaciones con el PSE no son las de antes”, advierte un cargo alavés.