16 detenidos y tres kilos de droga en otro golpe al poblado de Narón

Esta vez le llamaron 'Aquitania' al operativo. No es la primera ni será la última redada en el  poblado chabolista de Amenadás, un asentamiento de etnia gitana encastrado entre un nudo de carreteras en el barrio naronés de Freixeiro y que es "el mayor mercado de la droga"del noroeste de España, según fuentes policiales.

La brigada de estupefacientes de la comisaría ferrolana ha detenido a 16 personas, hombres y mujeres, casi todos emparentados entre sí y con antecedentes, como miembros de una trama que presuntamente traficaba con drogas en zona con una "actividad notable e importantes beneficios económicos". La investigación arrancó hace meses por el continuo trasiego de coches que entran y salen al poblado de Freixeiro y estuvo tutelada por el Juzgado de Instrucción número 1 de la ciudad que autorizó la entrada en las casetas y el registro de varios pisos en Narón donde se manipulaba la droga. Los agentes se incautaron de dos kilos de heroína (2.055 gramos), uno de cocaína (1.036 gramos) y otros 130 de hachís. Además, la banda guardaba 45.000 euros en efectivo y decomisaron tres coches, seis móviles y distinta documentación.

Los detenidos, que fueron arrestados el pasado miércoles 26, pasaron hoy a disposición judicial en los juzgados de la ciudad después de dos noches en la comisaría ferrolana. Lejos de recular, el flujo de toxicómanos que acuden a diario al poblado naronés ha ido en aumento durante la crisis y los clientes proceden tanto de la comarca como de otras provincias de Galicia y limítrofes. Aunque la presión policial es habitual, las contramedidas de seguridad que han tomado los pobladores de Amenadás, que patrullan continuamente el perímetro de su campamento para detectar controles "han dificultado en extremo" la investigación, explican fuentes del cuerpo. Los hombres vigilan el poblado y filtran a los compradores mientras las mujeres se ocupan de la venta en las casetas. Mantienen, además, encendida una hoguera para destruir la droga a la menor sospecha.

La redada se desarrolló con el apoyo de otros agentes de la brigada de Seguridad Ciudadana y de las Unidades de Intervención Policial (UPI) desplazadas desde la Jefatura provincial de A Coruña y los guías caninos. Los perros recorrieron el asentamiento para localizar la droga que los traficantes acostumbrar a enterrar en pequeñas cantidades en los lugares y recipientes más insospechados para tratar de despistar a los canes. Sólo los jerarcas del clan, explica la policía, conocían los puntos en los que se ocultaban las sustancias. Desde la brigada ferrolana tuvieron noticia de la recepción de un alijo, que presumiblemente venía para cubrir la demanda de estas fiestas, y que desencadenó la operación Aquitania. La Policía da por desarticulada esta "importante" banda que traficaba con drogas en la comarca ferrolana y les imputa delitos contra la salud pública.