Conselleiro a la fuga

Una veintena de empleados de la fábrica de paneles solares T-Solar han perseguido esta mañana al conselleiro Francisco Conde durante una visita que el titular de Industria realizaba al polígono de San Cibrao (Ourense), dónde se encuentra la factoría clausurada hace un mes y medio tras declararse en concurso de acreedores a pesar de haber recibido 65 millones de euros en ayudas públicas en cinco años. Los trabajadores querían dialogar, pero el conselleiro los ignoró. Conde, que visitó tres empresas de este parque industrial, ni se acercó a las instalaciones de T-Solar dónde medio centenar de empleados permanecen atrincherados desde hace dos semanas, ni se paró a hablar con los manifestantes.

Conde ha matizado que no se ha parado a dialogar porque “la locución directa la tenemos con el comité de empresa”, disuelto hace semanas tras la formalización del ERE que despidió a los 170 empleados que permanecían en plantilla. Además ha explicado que dialoga “con quien me pida hablar y en este caso no se produjo esa circunstancia”.

Además ha insistido en destacar el “diálogo fluido” de la Administración gallega con los representantes de los trabajadores. La Guardia Civil hizo acto de presencia cuando parte de los trabajadores de T-Solar accedieron al interior de sus instalaciones de la empresa Rodríguez López Autos, lo que derivó en un enfrentamiento entre empresarios y manifestantes. El gabinete de la consellería ha distribuido cuatro videos de la visita a los medios de comunicación pero en todos ellos se oculta el incidente. El conselleiro anunció que la Xunta ha abierto un expediente al gigante de la construcción Isolux-Corsan (propietario de la factoría de paneles solares) en el que reclama la devolución de 13 millones concedidos en forma de subvenciones, bajo la condición del mantenimiento del empleo y la actividad productiva, paralizada desde hace medio año.