De Andrés ve necesario reformar el sistema de organización local

El diputado generalde Álava, Javier de Andrés, ha sido tajante al afirmar que el sistema de organización de los Ayuntamientos del territorio histórico alavés requiere de reformas para evitar que más Ayuntamientos tengan que pedir ayuda al ente foral para sanear sus cuentas. El diputado general ha realizado estas declaraciones esta mañana en Vitoria tras anunciar la aprobación por parte de la Diputación del Plan de Viabilidad del Ayuntamiento de Valdegovía, que se convierte así en el quinto en solicitar el rescate – Salvatierra, el Valle de Añana, Navaridas y Laguardía lo pidieron anteriormente.

De Andrés afirma que “se acabó el tiempo del endeudamiento desmesurado” y que “hay que ejecutar presupuestos realistas”. Por ello ve necesario introducir reformas en el sistema foral, tal y como está haciendo el Gobierno de Madrid con otros Ayuntamientos españoles. Para el diputado el modelo actual “no es el mejor” porque ha permitido a los municipios “tomar decisiones por encima de sus capacidades económicas”, algo que según él acaba afectando a los ciudadanos y al propio futuro de los municipios, que se encuentran endeudados por mucho tiempo.

Las medidas a las que el Ayuntamiento de Valdegovía deberá hacer frente, para que la Diputación le ayude a subsanar la deuda de 754.732 euros, incluyen no asumir nuevas obras durante el periodo de vigencia del Plan – 2013/2017- que no sean financiadas con ahorro corriente o financiación externa de otras administraciones, empresas o particulares. Estas medidas son idénticas a las que se han atenido los otros cuatro Ayuntamientos que anteriormente solicitaron la ayuda.

Sin embargo, De Andrés ha negado hoy que se vaya a crear una normativa general para todos aquellos que pidan la activación del Plan de Movilidad, tal y cómo propuso la semana pasada en grupo juntero del PNV. El diputado ha asegurado que “es tarde para elaborar esa norma general” ya que implicaría realizar modificaciones en los planes anteriores, lo que podría suscitar el desacuerdo de las entidades financieras.