Junqueras pide ampliar a otros partidos su pacto con CiU

Esquerra Republicana debutó como primer partido de la oposición con un discurso en el que huyó del papel de azote y exhibió el de socio de Gobierno. Con el acuerdo de legislatura recién firmado con el líder de CiU Artur Mas, el republicano Oriol Junqueras optó por el guante blanco.

Su intervención —del tirón, y sin usar apuntes— fue una buena muestra de la complicidad que en estos momentos hay entre CiU y ERC. Se sumó a la tesis de Mas: pidió al resto de grupos, con especial énfasis al PSC e ICV, que se sumen al acuerdo de estabilidad parlamentaria del nuevo Gobierno. “Hace falta construir grandes consensos sobre el derecho a decidir y la recuperación de la actividad económica. Grandes consensos que superan de mucho el pacto de estabilidad firmado para esta legislatura”. Un acuerdo que, puntualizó Junqueras, está abierto también a los agentes sociales y económicos catalanes.

Para los republicanos, los dos ejes de la legislatura requieren del mayor consenso posible. La consulta por la autodeterminación, porque mayor legitimidad tendrá, entienden sus impulsores, cuanto más mayoría parlamentaria le respalde. Y los Presupuestos porque repartir entre más grupos su aprobación disminuiría el desgaste provocado por los recortes que teme ERC. Por ello el republicano defendió su principal impronta en el acuerdo, los aproximadamente 1.000 millones de ingresos que restarán el dinero a recortar: “Hemos intentado aprovechar los márgenes fiscales que aún quedan para tener unos ingresos adicionales que ayuden a suavizar los recortes”, defendió.

El republicano evitó concretar la batería de nuevos impuestos, pero fijó su vista en uno: el impuesto sobre la banca, criticado el miércoles por los socialistas. Citó los países en los que se aplica para defender que es un gravamen “perfectamente avalado en Europa” y reclamó a PSC e ICV que lo apoyen justo al resto de medidas planteadas para aumentar la fiscalidad: “Hay formaciones que han defendido estos tipos impositivos. Legítimamente, aspiremos a contar con su apoyo. Hay suficiente con repasar los programas electorales”.

Junqueras ligó la crisis económica con la necesidad de caminar hacia la independencia, y pidió a Mas que cuente con él para dirigirse a la “comunidad internacional y la Unión Europea” para defender el referéndum.

Mas aprovechó el turno de réplica a Junqueras para alabar las bondades del pacto. Un acuerdo que, subrayó, celebra porque fija “las líneas maestras “ de la legislatura. El presidente catalán avaló por completo la tesis de Junqueras: que los recortes son culpa del Gobierno español que centrifuga el déficit en las comunidades y no paga lo que debe a Cataluña.

El único rifirrafe que tuvo el líder de ERC en su debut parlamentario fue con la bancada de Ciutadans. En un momento de su intervención, los diputados se burlaron de las alusiones del republicano a ciudadanos del resto de España que defienden la independencia. Junqueras les espetó: “Si me dejan continuar se lo agradeceré mucho y tendrán apariencia de educados”.