Un millón de ahorro por reducir ayudas a partidos

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, lanzó el pasado fin de semana, en una entrevista con la agencia Europa Press, un órdago. No solo quiere reducir diputados sino también subvenciones a los partidos políticos, medida que enmarcó en el ahorro, pese a asegurar el PP que no era ese el objetivo principal del recorte de escaños.

“Hay que reducir las subvenciones a partidos políticos porque esas ayudas estaban previstas con un presupuesto de la Xunta de 12.000 millones de euros y ahora será de 8.400”, argumenta en la entrevista el presidente, quien añade que su “propuesta” es bajar las ayudas a los partidos “en torno al 25%”. Esa reducción supondría un ahorro de un millón de euros, pero sobre unas cantidades que no se fijaron en los últimos años de vacas gordas, como da a entender Feijóo, sino en 1985, cuando la situación de Galicia era más precaria y el presupuesto de la Xunta rondaba los 1.000 millones de euros, al cambio de las pesetas de entonces.

Las subvenciones a los partidos los premian por sus resultados electorales. Las correspondientes a los comicios autonómicos, las únicas que se regulan desde Galicia, se establecieron en la Lei 8/1985. Desde entonces, tal y como fija aquella norma (“las cantidades mencionadas se refieren a pesetas constantes”), la Xunta ha actualizado las cifras en función de la inflación y del cambio de pesetas a euros. Así, lo que en 1985 eran dos millones de pesetas (12.000 euros) por escaño obtenido, en las elecciones de 2009 fueron 19.413,66 euros. Lo que entonces eran 75 pesetas (0,45 euros) por voto, se convirtieron en 0,72 euros. Y las 20 pesetas (0,12 euros) por cada elector en compensación de gastos de envío de propaganda son ahora 0,20 euros.

Fue aplicando esa cifras de 1985 actualizadas como el PP, tras las autonómicas de 2009, recibió un total de 1.835.517,72 euros, el PSOE 1.392.384,06 euros y el BNG 957.287,6 euros. En suma, las arcas públicas autonómicas destinaron a subvenciones 4,18 millones de euros, por lo que el recorte del 25% propuesto por Feijóo supondría un ahorro, de repetirse los mismos resultados electorales, de alrededor de un millón de euros.

La ley de 1985 en la que se fijan esas cantidades es la misma que hay que cambiar para reducir diputados. Sin embargo, el PP no tocaba esas cifras en su propuesta de reforma remitida a PSOE y BNG el 31 de julio.