Las grietas obligan a cerrar por tercera vez un túnel de la C-14

El túnel de la Obaga Negra, en la carretera C-14, que une Lleida con Andorra, se ha convertido en una pesadilla para la Generalitat. Inaugurada en 2005, la galería, de 795 metros, quedará cerrada al tráfico por tercera vez mañana, por grietas y problemas de desprendimientos. Tras dos importantes reparaciones en 2009, el túnel se volverá a cerrar para cambiar el revestimiento y no podrá reabrirse al tráfico hasta dentro de tres meses.

El Departamento de Territorio y Sostenibilidad informó ayer en una nota de prensa que se han detectado “algunas patologías en el revestimiento como consecuencia del tipo y la disposición de estratos del terreno y por la incidencia de la lluvia de los últimos años”.

Los trabajos, presupuestados en tres millones de euros, consistirán en labores previas para desviar el tráfico por la antigua carretera, el reforzamiento del hormigón y la revisión de los sistemas de control.

La ejecución de los trabajos comportará importantes restricciones de tráfico. A partir de mañana se cerrará el túnel en ambos sentidos entre las 8.00 y las 21.00 horas. Posteriormente se volverá a cerrar el túnel y comenzará el desvío por la antigua carretera para afrontar el grueso de la obra. Se prevé que la carretera pueda volver a abrir antes del inicio de la temporada de esquí.

En agosto de 2009 dos desprendimientos ya obligaron a cortar el túnel. Una vez reparados los desperfectos, se volvió a abrir la galería, pero la normalidad solo duró 14 horas, pues se detectaron nuevos movimientos de tierra. Ahora la Generalitat espera dar una solución definitiva.