El PP vasco gana influencia en Génova

El PP vasco sale del congreso de Sevilla con un peso más relevante en el Comité Ejecutivo, aunque siga manteniendo el mismo número de miembros en él. El dato más importante es la entrada del número dos del partido, Iñaki Oyarzábal, como secretario de Justicia, Derechos y Libertades, un puesto de encaje entre el partido y los Ministeriros de Interior y Justicia, claves en estos momentos de gestión del final de ETA. Los populares vascos no tenían hasta ahora gestión de una cartera en Génova.

Alfonso Alonso, vocal electo en el anterior congreso de Valencia, ahora es miembro nato con un papel muy superior en tanto que portavoz en el Congreso —igual que Jaime Mayor Oreja lo es en el Parlamento Europeo—. Antonio Basagoiti continúa como miembro nato al ser presidente del partido en Euskadi y Mari Mar Blanco como vocal de designación directa de Rajoy.

Se cae como vocal electo Leopoldo Barreda, pero su tarea tiene mucho más calado como portavoz adjunto en la Cámara baja, especialmente dedicado también a las cuestiones de Interior y Justicia. “Es el mismo número, pero con mayor responsabilidad”, señalaba exultante a EL PAÍS un miembro del núcleo duro de Basagoiti.

Junto a ellos, la presidenta del Parlamento autonomo, Arantza Quiroga, y el delegado del Gobierno en Euskadi, Carlos Urquijo, entran como miembros electos en la Junta Directiva Nacional, el máximo órgano de dirección del partido entre congresos.

El propio Basagoiti sale también reforzado tras su papel como redactor de la ponencia política, la más relevante de las que ha debatido el cónclave sevillano.