Vuelven las brigadas con las que Lula busca acabar con la tala ilegal en el Amazonas

En lo profundo del Amazonas, una docena de agentes del Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (Ibama) lleva a cabo la clausura de una maderera ilegal en el estado de Pará, en el norte de Brasil. La brigada mide los troncos para ser usados como evidencia, mientras derriban la construcción de la planta clandestina.

Las redadas antideforestación han sido implementadas por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien ha prometido frenar el impacto ambiental de su predecesor, Jair Bolsonaro. Durante el Gobierno bolsonarista, se recortaron los fondos y personal destinado a las labores ambientales. El expresidente también criticó las multas de Ibama a los mineros y granjeros e impuso una orden para restringir el contacto de los agentes ambientales con la prensa.

El expresidente Bolsonaro también delegó al Ejército y posteriormente al Ministerio de Justicia las operaciones contra la deforestación, excluyendo a la agencia ambiental Ibama. En su mandato, se deforestó un área del Amazonas equivalente a la superficie de Dinamarca, un incremento del 60%.