Carne de elefante para celebrar el cumpleaños de Mugabe

El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, planea celebrar su 91 cumpleaños por todo lo alto. La fiesta, prevista para finales de este mes, tendrá lugar en un lujoso hotel situado junto a las Cataratas Victoria, el Elefant Hills Resort, un establecimiento que cuenta con spa, piscina, pistas de tenis y un gran campo de golf. Sin embargo, lo que está levantando más polémica es que el menú de la cena, a la que están invitadas unas 20.000 personas, incluirá carne de elefante y de impala, entre otros animales salvajes, según ha informado el periódico local Chronicle. Las protestas de los grupos conservacionistas no se han hecho esperar.

A la fiesta en un lujoso hotel están invitadas unas 20.000 personas

La parrillada con la que Mugabe y el Movimiento 21 de Febrero -fecha de nacimiento del presidente- pretenden agasajar a sus comensales incluye dos elefantes, dos búfalos y cinco impalas que proceden de la donación de un terrateniente local llamado Tendai Musasa, quien aseguró al Chronicle que “es una forma de apoyar el evento y garantizar un ambiente festivo en nuestra comunidad”. Asimismo, está previsto que se entregue a Mugabe una cabeza de león recién cazado, lo que eleva el gasto en animales salvajes a algo más de 100.000 euros. “En la actualidad estamos negociando con la Autoridad de Parques y Gestión de la Vida Salvaje para poder cazar a los animales unos días antes de la fiesta y con el hotel que conservará la carne”, añadió Musasa.

Además de los conservacionistas, que consideran que este menú de animales salvajes es “totalmente contrario de ética” y que debería prohibirse, según ha dicho Johny Rodrigues, presidente del Zimbabue Conservation Task Force, los primeros en protestar han sido los habitantes de la zona de las Cataratas Victoria, que acusan a Musasa de haber anunciado esta donación sin consultarles y sin recibir nada a cambio, ya que se trata de animales por los que normalmente se paga una cuota a la comunidad en el caso de ser cazados. “Sí han sido informados”, ha respondido Musasa, “nadie en su sano juicio se opondrá a este regalo porque los habitantes de la comunidad son los beneficiarios del programa de reforma agraria cuyo arquitecto es, precisamente, quien va a recibir esta donación”.

No es la primera vez que Mugabe, famoso por sus excentricidades, celebra una lujosa fiesta. El año pasado, con ocasión de su 90 cumpleaños, hizo soltar 90 globos y matar 90 vacas antes de ofrecer a sus miles de invitados una tarta de 90 kilos. Lo más paradójico es que mientras el nonagenario líder de la nación, que acaba de ser elegido presidente de la Unión Africana, derrocha el dinero en fiestas extravagantes, buena parte de la población del país vive bajo el umbral de la pobreza. El Viejo Bob (como es conocido en su país) lleva nada menos que 35 años en el poder y la posibilidad de que le suceda al frente del partido gubernamental, y por tanto del país, su propia esposa, Grace Marufu, hace temblar a los zimbabuenses, pues ven en ella una encarnación aún mayor del derroche y el despilfarro.