Prince recurre a la efectividad del sonido "funk" para reconquistar a su público

La plaza de toros de Marbella quedó pequeña para el espectáculo que presentó el artista antes conocido como Prince, en su gira europea que comenzó anoche en la Costa del Sol. La precipitada organización del concierto, que se anunció con menos de un mes de antelación, o las preferencias del Artista por actuar ahora en lugares más recogidos, llevaron a elegir un sitio que no fue el más adecuado. Al público, que se amontonó en la arena para estar más cerca del músico, le resultó difícil responder a los movimientos de baile que le proponía el Artista.

Un saltamontes de color púrpura aparece sobre una pequeña escalera y luego sobre un piano blanco, que tiene la palabra beautiful. El Artista, antes llamado Prince, inició anoche su gira por Europa con un concierto en Marbella, que abrió con el tema Push it up. Las 6.000 personas que abarrotaron medio coso taurino -la otra mitad la ocupaba un gran escenario negro presidido con el símbolo impronunciable que usa ahora como nombre el Artista- entraron inmediatamente en el juego, en la participación que pidió Prince.La música desbordante, que hace imposible al público abstraerse de los sonidos de El Artista, basta para meterse a los asistentes en el bolsillo. Con la misma energía que derrocha en el escenario arroja besos a sus seguidores o a su esposa Mayte García, que intervino en la dirección del vídeo del single The one. Tras seis años de no actuar en España, El Artista volvió anoche a Marbella para ofrecer un espectáculo inolvidable lleno de funk, soul, pop, rock, para hacer valer la figura musical que fue en los años ochenta. En su nuevo trabajo New power soul, abandona cualquier tentación de repetir sus éxitos del pasado para meterse en el sonido funk más puro.

El antiguo Prince dice estar convencido ahora de que su música es más clara y así trataban de entenderlo sus seguidores que anoche, según el ritmo que se les imponía, encendían mecheros o levantaban con ritmo sus brazos al cielo. Con una carrera que lleva más de 20 años, el cantante se propuso demostrar su capacidad de bucear en la creatividad musical, con lo que sedujo al público de Marbella.

Su nuevo trabajo, planteado fundamentalmente para el directo, no defraudó. El sonido y la fuerza que esperaba el público de su banda, The New Power Generation, convencieron, así como la puesta en escena del antiguo Prince, ahora mucho más místico como expresan sus letras con mensajes de paz y de libertad. En su banda cuenta con Larry Graham, Mister Hayes, Scott o Marva King. Después de conseguir 15 álbumes de platino y 10 singles de oro el cantante, que se presenta como un gladiador contra los grandes sellos discográficos, logra conmocionar al público. Continúa dando energía a la música, combinándola con la espontaneidad de sus canciones.

Interpretó The one, la canción que dice tratar de difundir la idea de que cada uno puede alcanzar su propia revelación. También destacaron en el concierto la seductora Come on o When U love somebody.