La vida de los deportados en Venezuela tras pasar por Guantánamo

Jhoan Bastidas es uno de los 180 venezolanos deportados por el gobierno de Estados Unidos que pasó cerca de dos semanas en la base militar de Guantánamo antes de ser enviados a Honduras y finalmente, llegar a Venezuela. El gobierno de Trump ha alegado que los venezolanos enviados a la base naval son miembros de la pandilla Tren de Aragua, que se originó en el país sudamericano, pero ha ofrecido poca evidencia para respaldarlo. En el caso de Bastidas, el sostiene que sus tatuajes pudieron haber sido un motivo para que las autoridades estadounidenses lo clasificaran como pandillero.

Bastidas, su madre y sus hermanos abandonaron Maracaibo en 2018, uno de los años más duros de la prolongada crisis del país. Partió hacia Estados Unidos en noviembre de 2023, financiado por un familiar. Al llegar a la frontera con México, se entregó a las autoridades estadounidenses y fue trasladado a un centro de detención en Texas.

En febrero, fue esposado y enviado a Guantánamo. Durante su reclusión permaneció con esposas cada vez que salía de su celda, incluso al ducharse cada tercer día. Tenía acceso al aire libre durante una hora al día, mientras que el resto del tiempo lo pasaba en una celda. Tras dos semanas en el centro, fue enviado de regreso a Venezuela el 20 de febrero.