El obispo de Mondoñedo afirma que el matrimonio entre gays abre la puerta a la poligamia

El obispo de Mondoñedo-Ferrol, José Gea Escolano, ha afirmado que aceptar la regulación del matrimonio entre homosexuales, aprobada en vísperas de fin de año por el Consejo de Ministros, abriría la puerta a otras variantes. "Si es bueno el matrimonio entre uno y uno o entre una y una, por qué no entre tres o cuatro personas, la poligamia o la poliandria", se ha preguntado el obispo, quien ha añadido que "tendríamos una destrucción plena de la familia". Por esta razón, gea Escolano ha hecho un llamamiento a los políticos cristianos de cualquier partido para "que sean coherentes con su fe y voten en contra".

Gea Escolano, en declaraciones a Europa Press Televisión, ha asegurado que "los homosexuales quieren que la Iglesia acepte esa realidad del matrimonio y consienta, pero es imposible pensar en ello, pues la doctrina de la Iglesia defiende que la sexualidad debe estar abierta a la vida y entre homosexuales no hay acto sexual abierto a la vida, por lo que es imposible que la Iglesia pueda aceptarlo".

En este sentido, ha afirmado que aceptar la opción que defiende el Gobierno abriría la puerta a otras variantes. "Si es bueno el matrimonio entre uno y uno o entre una y una, por qué no entre tres o cuatro personas, la poligamia o la poliandria", se preguntó el obispo, quien añadió que "tendríamos una destrucción plena de la familia".

Contra la adopción

Asimismo, se ha pronunciado en contra de la adopción por homosexuales, pues con el matrimonio convencional el niño tiene el ejemplo del padre y el amor masculino, y el ejemplo de la madre y el amor femenino, con las características propias de cada uno de estos amores, pero de cara a los homosexuales es tener dos padres o dos madres, por lo que le falta al niño la complementariedad en la formación y en la educación".

Sobre las reformas previstas en materia de divorcio, Gea Escolano ha destacado que "todo está en la misma línea, orientado a la destrucción de la familia". "No digo que quieran destruir a la familia, pero quieren complacer a unos u otros, son cuestiones políticas en las que están en juego los votos", por lo que ha instado al Ejecutivo a pensar en las consecunecias que todas estas medidas legales tendrán en la sociedad.

Respecto a la relación entre la Iglesia y el Estado de cara a 2005, el obispo ha afirmado que la línea que está llevando el Gobierno "no es positiva para la sociedad". "No voy a decir que cambien o que no cambien, pero sí que piensen en las consecuencias, pues boicotear y meter un disparo o un obús en la línea de flotación de la sociedad, del matrimonio, de la educación y de la vida no puede traer nada bueno", ha subrayado.