Chunhid Lachehabi avanza hacia el edificio donde se encuentra su apartamento. Los pilares están aún reforzados para evitar el derrumbe del edificio.FRANCISCO BONILLA (Reuters)Chunhid Lachehabi y su hija caminan entre los pilares del edificio donde viven, dañados por el terremoto de hace un año.FRANCISCO BONILLA (REUTERS)Una terraza, a las puertas de un edificio con andamios para reforzar la estructura.JUAN FRANCISCO MORENO (EFE)Pedro Fernández avanza, entre andamios, por las escaleras del edificio donde se encuentra su apartamento.FRANCISCO BONILLA (REUTERS)Un hombre llama al telefonillo en un bloque de apartamentos donde se ven las marcas del terremoto.FRANCISCO BONILLA (REUTERS)Una vecina de Lorca en el balcón de su vivienda, a pesar de estar marcada con un punto de color rojo como alarma de vivienda inhabitable.JULIÁN ROJASSonia Molina, que perdió a su hijo Raúl en el terremoto del 11 de mayo de 2011, en el que ella también resultó herida, ante el cartel que recuerda a Raúl en el chiringuito que regenta en el parque del barrio de La Viña.JUAN FRANCISCO MORENO (EFE)Una pareja de policías locales, a las puertas de un edificio dañado por el terremoto.FRANCISCO BONILLA (REUTERS)
