
Sierra Leona combate el brote de ‘mpox’: “Vemos casos de negación total por parte de los pacientes, que se refieren a ella como varicela”
La propagación de la enfermedad en el país africano ha llevado al ministerio de Salud a intensificar la campaña de vacunación y a introducir medidas de distanciamiento entre personas. Médicos Sin Fronteras ha puesto en marcha un centro con 50 camas en Freetown, la capital, para tratar pacientes moderados y graves



![Desde enero de 2024, se han registrado 45.822 casos confirmados de ‘mpox’ y 156.833 sospechosos, así como 213 muertes confirmadas y 1.840 sospechosas en 26 países africanos, entre los que destacan como más afectados la República Democrática del Congo, Sierra Leona, Burundi y Uganda, según datos del pasado jueves de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África (CDC).
Yap Boum, subgerente de incidentes de CDC, incidió en la rueda de prensa telemática en que el objetivo es que "para agosto, la ‘mpox’ esté controlada en países donde nunca se ha presentado lo que llamamos epidemia, y en otros lugares de la región donde sí la ha habido". "Entendemos que quizás no lleguemos a cero casos de ‘mpox’ en los países, pero queremos que alcancen un nivel en el que la puedan controlar fácilmente utilizando las diferentes medidas [vacunación, vigilancia y gestión de casos] que hemos aprendido", añadió Boum. En la imagen, Musu Kamara, enfermera del ministerio de Salud, recibe la primera dosis de la vacuna contra la ‘mpox’ en el centro de tratamiento apoyado por MSF en Calaba Town el 9 de junio.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/JSPL3AKFXVB3JARVA4WIXWA7M4.jpg?auth=fda54a98c7f4c8c7dd443f92f6e7239bda82636cd5c7479d4e0ff70565856262&width=414)



![Michael [nombre ficticio] uno de los pacientes que ha sido atendido en este centro, explica que los primeros síntomas que sintió fueron protuberancias, picazón y dolor en los genitales. Luego le empezó a picar la cara y a no poder dormir por las noches. Tras intentar tratarse con antibióticos, inyecciones, sal, limón o alcohol, decidió hacerse una foto y enviársela a una amiga suya que es enfermera, sin decirle que era él. “Me daba demasiada vergüenza”, explica este hombre. Le recomendó que se hiciera la prueba para la ‘mpox’ y cuando dio positivo, Michael no se sorprendió. “Querían mandar una ambulancia para recogerme y llevarme al centro, pero me negué porque todos mis vecinos sabrían que tengo la enfermedad", recuerda. “No le he dicho a ninguno de mis amigos ni familiares que tengo ‘mpox’. No lo entenderían y les daría miedo estar cerca de mí”, explica. “Yo también tenía miedo de esta enfermedad. En el hospital donde me hice la prueba, escuché a algunos pacientes con ‘mpox’ llorando, y pensé que si mis resultados salían positivos, yo también lloraría… y así sucedió”. George Kamara, trabajador de MSF, examina a un paciente el 19 de junio de 2025 en el centro de tratamiento de MSF en Calaba Town, Freetown.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/JF6IUAPSHRDVRODCUBH7VZZ7LI.jpg?auth=df70232357b9dd966a852be824d424049aa131f5771a7410aeeee9fddc26f88e&width=414)