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Lo que Isabel Preysler cuenta en su autobiografía: cómo vivió las infidelidades de Julio Iglesias, los celos de Miguel Boyer y las cartas de Vargas Llosa

La ‘socialité’ publica este 22 de octubre un libro en el que cuenta su historia de primera mano y en el que hace un repaso de sus tres matrimonios y su noviazgo con el Premio Nobel de literatura, de quien no pudo despedirse

Andrea Jiménez

Todo lo que rodea a la autobiografía de Isabel Preysler (Manila, 74 años), Mi verdadera historia, ha sido un secreto bien guardado. Solo han tenido acceso los más cercanos y la revista ¡Hola!, su cabecera de referencia —aunque la portada de este miércoles se la ha llevado la boda de Stella del Carmen Banderas— y a la que ha concedido la primera entrevista antes de que el libro se publicase y el resto de medios de comunicación tuviesen acceso a él. También antes de su gran cita con la prensa, este mismo miércoles 22 de octubre a las 13.00 en uno de los hoteles más exclusivos del centro de Madrid.

El gran despliegue de la revista del corazón incluye artículos de todo tipo: una entrevista, las “escenas de celos” de sus exparejas, los desmentidos de su libro, las 15 revelaciones más sorprendentes y la verdad detrás de la canción De niña a mujer de Julio Iglesias. Desde que llegó a España en 1970, Preysler se convirtió en uno de los personajes más habituales de la crónica social tras conocerse su relación con el cantante. Ahora es ella la que cuenta toda su historia —aunque en realidad lleva años haciéndolo por capítulos a golpe de exclusiva—.

“Ha llegado la edad de poder hacerlo, se han dicho tantas cosas falsas sobre mí a lo largo de los años, sin que me molestara en desmentirlas, que he decidido hacerlo ahora”, afirma Preysler en la primera de las preguntas de la citada entrevista. ¿Y por qué ahora? La respuesta es clara: quiere que sus nietos, a quienes dedica el libro, conozcan la historia real de su abuela, contada de primera mano.

Su vida no deja indiferente a nadie: se casó con un cantante, con un marqués, con un ministro socialista y salió con un escritor Premio Nobel. Este último capítulo es el que más expectación ha generado por el silencio de la socialité tras la muerte de Mario Vargas Llosa el pasado mes de abril. Pero antes de llegar hasta aquí, Preysler también quiere explicar cómo vivió su matrimonio con Julio Iglesias y las infidelidades que el cantante protagonizó a escondidas —pese a que era un secreto a voces—. “Para complacerle, me olvidé de mí y me convertí en su ideal de mujer. Mi aspiración era aportarle tranquilidad y que nuestra relación no interfiriese en su trabajo. De esa manera, el mundo de Julio se iba ensanchando y el mío se iba reduciendo a las cuatro paredes de nuestro hogar”, explica en un fragmento del libro. Fruto de esa relación nacerían sus tres hijos mayores: Chábeli, Julio José y Enrique. “Le conté que lo sabía [las infidelidades], y aunque aún mantenía la esperanza de que él me lo negara todo y que me dijera que no hiciera caso de habladurías… no fue así. Entre nosotros se instaló un silencio incómodo. Me miró, bajó la vista y reconoció que todo era verdad. Me quedé sin fuerzas y sin voz. Esa noche ya no durmió en casa”, continúa desvelando.

En un movimiento sin precedentes, cuando todavía no había una ley de divorcio, el matrimonio anunció a través de un comunicado publicado en la revista ¡Hola! su separación: “La infidelidad de Julio fue el principal motivo de la separación, no del divorcio, porque entonces no estaba permitido en España. Nunca hay un solo culpable cuando acaba un matrimonio. Los dos éramos muy jóvenes. Julio no tenía más remedio que viajar y pasar mucho tiempo fuera de casa porque ya empezaba a ser el cantante importantísimo en el que se convirtió luego. Yo me sentía encerrada, sola y obligada a tomar decisiones, sin ayuda de un marido”, afirma casi 50 años más tarde. Desvela ahora que el momento más duro de su vida fue cuando se vio obligada a separarse de sus hijos mayores por seguridad tras el secuestro de Julio Iglesias Puga, padre del cantante.

Dos años después de anunciar su separación del artista, Preysler volvería a pasar por el altar y se casaría con el marqués Carlos Falcó: “Fue fundamentalmente un hombre lleno de bondad que procuró, a lo largo de su vida, hacer feliz a la gente que le rodeaba. Los que tuvimos la suerte de conocerlo no le olvidaremos nunca”, afirma en el libro del padre de su hija Tamara, fallecido en 2020. Y especifica en la entrevista: “Durante nuestro matrimonio fue cuando yo aprendí de verdad todo lo bella que es la vida: la ópera, el deporte, los viajes, el campo... Todo lo viví con Carlos”.

Todavía casada con Falcó, la socialité conocería a Miguel Boyer, su tercer marido. “Miguel y yo nos habíamos enamorado. Había ocurrido sin que ninguno de los dos lo planeáramos y, desde luego, sin querer provocar ningún sufrimiento. Evidentemente, no pude evitar que Carlos se sintiera traicionado y dolido al enterarse de nuestra relación. Tuvimos una conversación tensa y triste, comprendimos que nuestro matrimonio había terminado y nuestro mundo se rompió en mil pedazos”, desvela en las memorias. Aunque con el exministro socialista vivió años muy felices, reconoce que estos estuvieron marcados por los celos de él: “Tenía la ridícula obsesión de pensar y creer que todo el mundo se enamoraba de mí. Con los años, los celos se acrecentaron. No podía soportar que yo me riera con alguien que no fuera él. En una ocasión le rogué que acudiera al psiquiatra para solucionarlo”. Y continúa: “Muchas veces tenía que llamar a nuestros amigos, con los que habíamos salido a cenar o de fiesta, para pedirles perdón por las escenas que le montaba”.

Y llega por fin el momento más esperado: su relación con el escritor peruano. “A la salida de la fiesta, me besó en el ascensor. Conviví con él casi ocho años y pude conocer su parte más humana, más cotidiana, su verdadera personalidad, muy compleja, con aspectos que mucha gente ignora, porque conseguía ocultarlos”, explica en el tomo. A través de cartas manuscritas de Vargas Llosa, Preysler explica su noviazgo: “Reflejan la realidad de mi historia con Mario, sin intermediarios ni interpretaciones de cómo era nuestra relación. Ahí están las cartas y que el lector decida”. También incluye la última carta que le envío y que fue la de la ruptura en 2022: “Por favor, manda a alguien a recoger todas tus cosas”. “No quedaba otra forma de terminar la relación. Ni tuve ocasión de despedirme de él antes de su fallecimiento ni me lo hubiese permitido la familia”, afirma en la entrevista.

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Sobre la firma

Andrea Jiménez
Redactora de la sección Gente y Estilo de Vida. Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, ciudad natal en la que realizó prácticas en RTVE. Trabajó en Jaleos de El Español y cursó el máster de Periodismo UAM-EL PAÍS con la promoción 2021-2023.
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