
Europa bajo presión o cómo un continente ha acabado atrapado entre amenazas externas e internas
Europa atraviesa uno de sus momentos más delicados en décadas. La combinación de amenazas externas e internas genera una sensación de vulnerabilidad inédita desde el final de la Guerra Fría.
¿Por qué Europa siente que está bajo asedio? Porque las presiones llegan desde varios frentes a la vez.
- Rusia mantiene una guerra híbrida contra los aliados de Kiev.
- Washington adopta un tono que debilita políticamente a la UE y legitima a sus adversarios internos.
- Actores como Elon Musk o partidos populistas amplifican mensajes que erosionan la confianza en las instituciones europeas.
- Y, además, la UE arrastra dependencias críticas como la seguridad estadounidense, los bienes esenciales procedentes de China y la energía rusa, lo que limita su margen de maniobra.
¿Qué está haciendo Europa frente a estas amenazas? Ha sancionado a Rusia, reducido su dependencia energética y reforzado su capacidad frente a ataques híbridos, pero avanza con más lentitud ante la presión estadounidense y la asertividad china.
¿Y qué puede hacer ahora? Los expertos coinciden en que la respuesta pasa por más integración. Culminar el mercado interior en 2028, avanzar en la ampliación a los países candidatos y reforzar la capacidad de defensa y resiliencia democrática permitiría reducir la vulnerabilidad del continente.
©Foto: Jacques Julien (Getty Images)