
Miniguía para comprender el nuevo modelo de financiación que han pactado el Gobierno y Cataluña
El Gobierno y la Generalitat han pactado las bases de un nuevo modelo de financiación para Cataluña. El acuerdo, que se cerró este lunes en la Comisión Bilateral, es un primer paso: marca la dirección, pero no concreta aún los detalles.
¿Por qué es importante? El sistema de financiación vigente lleva casi 12 años caducado. Este nuevo modelo parte del acuerdo entre el PSC y ERC para investir a Salvador Illa y plantea un cambio de paradigma: que las comunidades gestionen más impuestos, que haya más corresponsabilidad y que se tenga en cuenta la singularidad catalana.
¿Qué incluye?
- Cataluña podrá gestionar de forma progresiva todos los impuestos (recaudación, liquidación, inspección…).
- El Estado descontará primero los servicios que presta y luego la Generalitat pagará una cuota de solidaridad.
- Esa cuota debe calcularse de forma objetiva y transparente, y no puede hacer que Cataluña pierda posiciones en el ranking de riqueza (lo que llaman “ordinalidad”).
- El modelo está pensado para ser generalizable a otras comunidades que quieran asumir más competencias.
¿Quién lo apoya y quién no? ERC y PSC celebran el acuerdo como “un avance”, pero Junts lo rechaza al considerar que no reduce el déficit fiscal ni supone un modelo singular.
¿Qué puede pasar ahora? El pacto llegará “en breve” al Consejo de Ministros y se debatirá después del verano en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), donde se sientan todos los consejeros de Hacienda autonómicos. Allí no solo hay resistencia del PP, también puede haber diferencias dentro del PSOE.
©Foto: Massimiliano Minocri