
El bloque de investidura sigue vivo: los apoyos del Gobierno resisten… por ahora
Pedro Sánchez ha afrontado esta semana su pleno más delicado desde que comenzó la legislatura.
Contexto. Acusado de haber cerrado los ojos ante la corrupción en su entorno, respondió con un plan anticorrupción de 15 medidas. Pero más allá del contenido, la clave estaba en comprobar si aún conserva los apoyos necesarios para seguir en La Moncloa. Y, por ahora, la mayoría resiste, aunque cada vez más exigente y fragmentada.
El bloque de investidura: tocado, pero no hundido. Aunque las intervenciones de sus socios fueron duras, ninguno rompió con el Gobierno:
- Sumar respaldó el plan, reivindicando como propias 10 de las 15 medidas.
- Bildu mantuvo su apoyo para frenar al PP y Vox, y Podemos criticó el proyecto por considerarlo insuficiente.
- Desde ERC, Gabriel Rufián lanzó una advertencia directa: si los casos de corrupción escalan, lo empujarán a las urnas.
- El PNV habló de una confianza “en la UCI”, y tanto BNG como Compromís reclamaron que se cumplan los pactos.
- Más frío fue Junts, que se limitó a recordar que su lealtad no es con la estabilidad del Gobierno, sino con Cataluña: “Está usted en prórroga”, dijo Nogueras.
La oposición endurece el tono (y sube el volumen)
- El líder del PP acusó a Sánchez de ser el “jefe de la trama”. Su discurso fue especialmente duro en lo personal, aludiendo incluso a su entorno familiar.
- Santiago Abascal (Vox) exigió la dimisión inmediata del presidente, calificando sus medidas de “puro teatro”.
¿Y ahora qué? La legislatura continúa, aunque pende de un hilo, y todo dependerá de tres factores: que las medidas se conviertan en hechos, que Sánchez cumpla los pactos firmados y que no haya nuevas revelaciones que compliquen aún más el escenario.
©Foto: Álvaro García