Una trabajadora de la limpieza de 51 años muere en plena ola de calor en Barcelona

Montserrat A., una trabajadora de los servicios de limpieza de Barcelona de 51 años, murió el sábado por la tarde poco después de completar su jornada de trabajo y en plena ola de calor. El Ayuntamiento de Barcelona ha confirmado el suceso, aunque no ha podido aclarar las causas concretas del fallecimiento de la mujer, que se están investigando. La autopsia determinará si la muerte de Montserrat está relacionada al episodio de altas temperaturas o responde a otro motivo.

El incidente ocurrió la noche del sábado. La limpiadora estuvo realizando su jornada laboral en el barrio del Raval, en el distrito de Ciutat Vella, en algunas de las horas de más intensidad de calor en el centro de la ciudad: entre las 14 y las 21 horas aproximadamente, según fuentes sindicales. Poco después de finalizar su turno, y cuando ya se encontraba en su casa, falleció. La mujer, según las mismas fuentes, cubre un área de calles del casco viejo que se encuentran, mayoritariamente, en zona de sombra.

El sábado por la noche, tras el fallecimiento, los familiares de Montserrat se dirigieron a la sede de la empresa de limpieza. La víctima trabajaba para FCC, una de las cuatro contratas que se reparten el contrato de limpieza en la ciudad de Barcelona. Los familiares pidieron explicaciones y la mañana de este domingo han regresado a las oficinas. La noticia del fallecimiento de Montserrat, muy apreciada entre los demás compañeros, se han conocido a lo largo de la mañana. Como ocurre en estos casos, los trabajadores han guardado un minuto de silencio.

Ramon Cebrián, presidente del comité de empresa del servicio de limpieza de Barcelona, explica que los trabajadores disponen de un protocolo ante los episodios de calor extrema como el que esta semana azota Cataluña. “Ante una situación de estrés por calor, hay que entrar en lugares frescos, beber líquidos, incluso llamar a la ambulancia o al encargado cuando alguien se encuentra mal, porque normalmente la gente trabaja sola”, cuenta Cebrián. No consta, según fuentes sindicales, que la tarde del sábado algún trabajador solicitara asistencia por ese motivo. Cebrián no quiere especular con las causas de la muerte, que resolverá la autopsia, pero traslada el pesar de la plantilla. “La gente lo está pasando mal. Todo el mundo se siente muy identificado”.

Preguntado por este diario, el consistorio ha asegurado que ha abierto una investigación para aclarar lo sucedido y ha trasladado el pésame a la familia y amigos de la víctima. Una de las hipótesis que se baraja es que la muerte tenga que ver con un golpe de calor provocado por las altas temperaturas.