Richard Gere aparece en Gràcia tras el apagón: “No dudaría en sustituir a Trump por cualquiera de las mujeres de esta sala”

“Volé de Nueva York a Barcelona. Y cuando aterricé me advirtieron de que se había producido un apagón. Tenía dos opciones, esperar en el aeropuerto o montarme en el coche. Y pese a las advertencias, me monté en el coche. Sorprendentemente, todo el mundo fue muy amable, nadie gritó. En momentos así emergen nuestros auténticos seres, somos amables, gentiles, nos preocupamos por los otros, pues no está tan mal. Es como romper con la continuidad de nuestro egoísmo por un día para ser mejores”. Sería solo una anécdota más de las que hemos leído sobre el apagón de este 28 de abril en España si no fuera porque quien lo dice es Richard Gere, actor norteamericano, un genio que practica la meditación desde los 22 años y tiene el mejor pelo del cine mundial.

Gere se paseó este martes por la tarde por la alfombra roja de la calle Verdi, en el barrio de Gràcia de Barcelona, para presentar en el BCN Film Fest Sabiduría y felicidad (Wisdom of Happiness: a heart to heart with the Dalai Lama), un documental en el que el líder político y religioso, premio Nobel de la Paz, reflexiona sobre cómo se puede ser feliz en un mundo tan complejo.

El actor es el productor ejecutivo del documental que transmite, en otros muchos mensajes, la importancia de la meditación para desarrollar la compasión y el papel clave de la mujer. El Dalái Lama (Tenzin Gyatso) lo explica así: “Si hubiera más mujeres líderes, el mundo sería más pacífico”. Tras la proyección, y durante el coloquio, se le preguntó a Gere por esa frase. Y respondió con una sonrisa: “Mujeres al mando, un mundo mejor: es algo que se dice bastante a menudo y yo creo que las mujeres tienen más afinidad con la compasión y la empatía, y son altamente resolutivas. mientras que los hombres en el mundo actual pueden resultar más inestables e incluso ridículos. No dudaría ni un segundo en sustituir a Trump por cualquiera de las mujeres que están en esta sala”. Al ser preguntando por si se vale del budismo para soportar la industria de Hollywood, afirmó: “Hollywood no es nada, el mundo sí que es duro, estar casado es duro, la política, la familia. El budismo te permite mantenerte conectado. El mundo no cambia rezando sino actuando”.

Gere, de 75 años, se metió al público en el bolsillo desde el primer minuto. No fue difícil. Estaban todos muy entregados. “El mundo necesita el conocimiento del Dalái Lama”, subrayó Barbara Miller, codirectora de la película junto con Philip Delaquis. El documental hace un repaso con imágenes de archivo de su vida, de su niñez, de su relación con su padre y, sobre todo, con su madre, una campesina analfabeta de la que cuenta que aprendió todo lo que sabe sobre el amor y la compasión. “Descubrimos que el Dalái Lama tenía un archivo inmenso, era muchísimo material. Nos dejaron usarlo y digitalizarlo, es una herencia cultural enorme”, detalló Miller. “A su santidad no le gusta verse a sí mismo en pantalla, pero sí vio trozos y disfrutó y lo que le hizo sonreír fue verse a sí mismo jugando con sus amigos en la nieve”, explicó el protagonista de Oficial y Caballero y Pretty Woman.

Fue la directora del BCN Film Festival, Conchita Casanovas, la que presentó al actor con todos los honores de una estrella. “Vamos a aguantar la respiración un poco”, dijo. “Pasan los años, no para él”, bromeó. Y remató: “Es una estrella de las que te hacen sudar las manos. Con ustedes Richard Gere”.