Debemos aportar soluciones
En múltiples ciudades, miles de personas han salido a la calle a manifestarse. Las causas más cercanas en el tiempo son más que justificadas: la emergencia feminista y el cambio climático. Las fachadas de los edificios municipales se han iluminado de color violeta, las luces de nuestros móviles han tratado de encender la noche y cientos de personas han acompañado a Greta Thunberg en su marcha por Nueva York. El diagnóstico está claro. En el primero de los casos, una sola víctima de violencia de género es absolutamente inaceptable, y en el segundo, los desastres naturales propios del cambio climático son más que frecuentes. Hemos de indignarnos, pero no será suficiente con denunciarlo. Si nuestra protesta solo recae en el diagnóstico, seguiremos exentos de las posibles y ansiadas medidas terapéuticas. Y ya sabemos lo que ocurre con una enfermedad o varias dejadas a su libre evolución.
Luis Alberto Rodríguez Arroyo. Santo Tomás de las Ollas (León)
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Lo más visto
- De celebrar el Gordo a temer no cobrarlo: la comisión de fiestas de Villamanín se dejó en casa un talonario vendido antes del sorteo
- Maisa Hens, cantante: “Gracias al anuncio de El Almendro no tuve que volver a hacer un ‘casting”
- Los socialistas valencianos reclaman a Feijóo que entregue a la jueza de la dana la conversación íntegra con Mazón
- La obsesión de Trump por poner su nombre a todo carece de precedentes en Estados Unidos
- “Un jardín con casa, no una casa con jardín”: así es la premiada vivienda de 146 metros cuadrados que se camufla con la vegetación




























































