
Los cinco mejores ejercicios según la Universidad de Harvard (y ninguno es correr)
Estos son los que más beneficios reportan a la salud al corto y largo plazo, según I-Min Lee, profesora de Medicina de Harvard

I-Min Lee, profesora de Medicina y Epidemiología de la Facultad de Medicina de Harvard asegura que correr largas distancias no es bueno para las articulaciones ni para el sistema digestivo. Su propuesta deportiva incluye otros cinco ejercicios que aportan beneficios que van desde perder peso, hasta ganar músculo, proteger el corazón y fortalecer los huesos.

Para Marta Rosado, efectivamente, "mejora el equilibrio, la coordinación y la flexibilidad. Previene la aparición de dolores lumbares y problemas de columna vertebral. Aprendemos a respirar y a canalizar nuestra energía. Mejora el sueño y relaja tanto física como mentalmente. Al no existir impacto lo puede realizar cualquier persona. Yo lo recomendaría sobre todo después de los 50".

"Es una actividad que mejora el sistema cardiovascular, puede ayudar a fortalecer el tren inferior en personas mayores y gente con bajo nivel de condición física", asegura Ángel Merchán, director de Homewellness. "Disminuye los niveles de colesterol, es esencial para diabéticos, refuerza el sistema inmunológico, mejora la circulación y oxigena el cuerpo", dice la entrenadora personal Marta Rosado, aunque "yo no lo considero un entrenamiento".

La forma correcta de hacerlos, de acuerdo con Harvard, es apretar los músculos usados para contener la orina o el gas durante dos o tres segundos, soltar y repetir 10 veces. Así de cuatro a cinco veces al día. Marta Rosado advierte de que "la realización de un número excesivo de estos ejercicios puede conducir a un debilitamiento de los músculos del suelo pélvico y dar lugar a una nueva reducción de la capacidad de controlar la vejiga".

"Nadar es bueno para las personas con artritis", dice Lee en el boletín. Aunque lo ve bastante completo, Ángel Merchán, director de la empresa de entrenamiento personal Homewellness, no considera "que exista el entrenamiento perfecto tomando solo una disciplina, hay que abordarlo desde diferentes prácticas. Los impactos y las cargas son también necesarios por ejemplo para la prevención de la osteoporosis y para el estimulo de los tendones. Debe combinarse con trabajo de fuerza —pesas por ejemplo— e impactos adaptados a cada persona (por ejemplo, correr)".

Marta Rosado también está de acuerdo. "Es esencial para mantener el peso perdido, protege huesos y músculos, mejora la mecánica del cuerpo y nos hace más conscientes de cada movimiento. Aumenta los niveles de energía y mejora el estado de ánimo".