Shakira ha ofrecido por fin su esperado concierto de las Pirámides de Giza ante miles de personas, pero muchos de sus fans, vencidos por el caos circulatorio habitual de El Cairo, que se sumó al provocado por la colombiana, se tuvieron que conformar con verla desde una duna. En la foto, uno de los momentos estelares de su Oral Fixation tour.REUTERSShakira, la mujer llena de gracia -que es lo que significa su nombre en árabe- ha logrado que sus incondicionales movieran de verdad las caderas, pues pocas veces habrá encontrado en su público tantas seguidoras que saben bailar tanto o mejor que ella. Contrariamente a lo que suele ser común El Cairo, apenas había velos entre las asistentes, sino melenas descubiertas entre un público mayoritariamente femenino que había pagado un mínimo de 400 libras (70 dólares) para verla.REUTERSLa colombiana, cuyo padre es libanés, ha cantado en la Meseta de las Pirámides, donde normalmente se celebran los famosos espectáculos de luz y sonido, en un escenario con fondos variables y dos pantallas gigantes a los dos extremos. El espectáculo combinaba lo árabe, lo anglosajón y lo latino, pero en los alrededores de las Pirámides los que no se movían eran los kilómetros y kilómetros de coches de desesperados fans, que finalmente se perdieron el concierto.EFELo más paradójico es que el concierto de Shakira, anunciado hace sólo dos semanas, ha sido un éxito de público y eso que no ha contado apenas con promoción en carteles, anuncios de radio y televisión ni artículos de prensa. Además, se ha celebrado en un país donde no abundan los espectáculos de estrellas internacionales. El recital ha arrancado con aires árabes, la estrella ha pasado después a los ritmos ingleses de Fijación Oral 2, y más tarde a las canciones en español interpretadas con un fondo de música oriental.EFELa apoteosis del concierto ha sido cuando Shakira se ha puesto un traje de baile oriental de dos piezas. "Ha llegado el momento de que bailéis. Egipto, te quiero ver bailar", ha dicho Shakira. En otro guiño al país, en el bis Shakira ha vuelto al escenario con otro traje de lentejuelas y se ha puesto a bailar Las mil y una noches, que inmortalizó la cantante egipcia Um Kolsum.EFEA causa de las fuertes retenciones, el concierto ha empezado una hora y cuarto más tarde de lo previsto. Tras otra hora y media de recital, vuelta al atasco. Y lo peor fue llegar a pie por el desierto en busca de los coches, aparcados en algún remoto lugar, ya que los autobuses de la ida habían desaparecido.EFELa apoteosis del concierto fue cuando Shakira se puso un traje de baile oriental de dos piezas. "Ha llegado el momento de que bailéis. Egipto, te quiero ver bailar", dijo Shakira a los espectadores.REUTERS