Manual de instrucciones para dejar atrás la medicina de talla única

La Medicina Personalizada de Precisión se basa en la recopilación y análisis de datos ómicos (como los genómicos y epigenómicos) junto con información clínica, utilizando tecnologías digitales de salud. Estos datos se integran con factores ambientales, epidemiológicos, sociales y económicos para ofrecer un enfoque de salud integral y adaptado a cada individuo, que abarque la predicción, la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades. Así define la Fundación Instituto Roche una aproximación sanitaria diametralmente opuesta a la convencional “medicina de talla única”, como la denomina. “Si hace 20 años se trataba aún de un área de conocimiento incipiente, hoy se presenta como uno de los principales elementos que transformará el sistema sanitario, al permitir conocer cómo puede afectar una enfermedad, clasificarla en función de cómo se manifiesta y predecir la respuesta a un determinado medicamento”, describe su directora gerente, Consuelo Martín de Dios.

La Medicina Personalizada de Precisión es la gran oportunidad para optimizar la eficiencia del sistema y garantizar su sostenibilidad

Consuelo Martín de Dios, directora gerente de la Fundación Instituto Roche

“Su implementación representa una oportunidad para optimizar la eficiencia del sistema sanitario y garantizar su sostenibilidad”, asegura Martín de Dios. Y lo corroboran los datos de la institución que dirige; este cambio de paradigma –con estrategias de prevención y tratamiento a medida para grupos definidos de individuos– mejora los resultados en salud, evita gastos innecesarios a largo plazo y minimiza ineficiencias y sesgos.

En los últimos años la Medicina Personalizada de Precisión se está aplicando, es verdad que de manera bastante heterogénea, en los sistemas de salud de todo el mundo. Europa se perfila como referente global, con iniciativas como el Consorcio Internacional de Medicina Personalizada (ICPerMed), que fomenta la colaboración en investigación e innovación en este ámbito, o el proyecto 1+Million Genomes, para la obtención de datos en salud en distintos países.

Velocidad dispar

España se encuentra en un proceso de consolidación, con estrategias y planes que impulsan su desarrollo, como el PERTE de Salud de Vanguardia o el Plan 5P, que busca integrar la Medicina Personalizada de Precisión en la práctica clínica mediante el desarrollo de infraestructuras y recursos específicos.

Sin embargo, “la ausencia de una estrategia nacional plenamente consolidada ha generado diferencias en su desarrollo”, revela un reciente informe impulsado por la Fundación Instituto Roche, que lleva por título Aproximación Coordinada en Medicina Personalizada de Precisión entre Comunidades Autónomas. Se refiere a la velocidad desigual que han imprimido a la consecución de este objetivo las distintas comunidades autónomas. Andalucía, Castilla y León o Navarra, por ejemplo, han definido estrategias específicas en esta área, mientras que otras están en proceso de elaborar sus propios marcos de acción, según afirma el informe. Este documento parte de un hecho constatable: para que la implantación sea armónica en todo el territorio nacional es fundamental la coordinación y colaboración entre regiones. Solo así se establecerán sinergias y se evitarán duplicidades.

Son 24 los expertos que recomiendan la puesta en marcha de una Comisión Técnica Específica de Medicina Personalizada de Precisión en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud

Por eso, el primer mensaje de este nuevo estudio, coordinado por el doctor Ángel Carracedo, es el de que hay que definir un marco común que alinee estrategias e iniciativas. Los ocho expertos participantes –junto a 15 más que complementaron y ampliaron las aportaciones de los investigadores principales– recomiendan la puesta en marcha de una Comisión Técnica Específica de Medicina Personalizada de Precisión en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud con el objetivo de liderar la coordinación y la colaboración entre regiones.

Además, proponen la creación de seis grupos de trabajo que aborden aspectos fundamentales para impulsar el cambio: gobernanza, regulación y marco normativo; financiación, sostenibilidad y eficiencia; digitalización y uso de datos; investigación e innovación; traslación al modelo asistencial; formación, nuevos perfiles sanitarios y gestión de recursos humanos. “La incorporación de especialistas en genética, biología molecular, bioinformática, datos e inteligencia artificial o farmacogenética de forma homogénea facilitaría la coordinación y la implementación eficaz en todo el territorio”, argumentan.

La investigación recoge 12 recomendaciones más que deberían de ser asumidas por la comisión técnica, entre las que se incluye la conveniencia de la colaboración público-privada. Otras dos entran de lleno en el factor humano: la participación activa de la ciudadanía en la implementación de la Medicina Personalizada de Precisión y el acceso equitativo de los pacientes a las nuevas tecnologías, técnicas y tratamientos. “Estamos convencidos de que cada paciente es único”, concluye Martín de Dios.