GM redobla su apuesta por Brasil

General Motors, en pleno proceso de transformación tras el escándalo de las llamadas a revisión, anunció este jueves un plan de inversión en Brasil por valor de 2.900 millones de dólares que se ejecutará durante los próximos cinco años. Los detalles se los explicó Mary Barra, consejera delegada de la automovilística estadounidense, a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.

Barra se encuentra en el país sudamericano visitando las operaciones del grupo. Esta liquidez por valor de 6.500 millones de reales está destinada al desarrollo de vehículos y de nuevas tecnologías, además de a la formación de empleados. Es una apuesta de la compañía a largo plazo, pese a las dificultades que los fabricantes afrontan en los mercados emergentes.

El plan de capital permitirá mantener las plantas de GM en operación y garantizar el suministro de componentes para la marca Chevrolet. Hace unos meses que el gigante de Detroit anunció que abandona las ventas de esta marca en Europa, para no crear competencia a su filial Opel. En paralelo, hay en curso un cambio estructural interno en Detroit.

"Es cierto que hay retos", admitió Barra, refiriéndose a las dificultades del mercado. En los últimos resultados trimestrales, GM registró pérdidas en Latinoamericano por valor de 100 millones de dólares. Un año antes ganó 100 millones. Pese a ello, ve "grandes" oportunidades a medio y largo plazo en el mercado brasileño y en todo el continente. Los países emergentes son claves.

La industria del automóvil en Brasil representa la quinta parte de la economía. Sin embargo, el sector atraviesa por intenso proceso de ajuste por la caída en las ventas, reflejo del estancamiento de la actividad económica y un frenazo en la demanda. Barra no habló de empleo. Insistió que la inversión permitirá fabricar coches de mejor calidad y que no le importa quién esté de presidente.