Menos máquinas de coser, menos faxes o telégrafos

Hay algunos grupos de productos que estudian el Instituto Nacional de Estadística (INE) que no se las tienen que ver con la crisis, sino con el paso del tiempo. El presupuesto de las familias para las máquinas de coser y tricotar ha encogido un 54% desde 2008 y araña menos de un euro de media por hogar (96 céntimos), lo que las convierte en un concepto despreciable en términos estadísticos.

En la era de Internet y los teléfonos móviles, tampoco corren buenos tiempos para los faxes, los telégrafos o los teléfonos públicos, cuyos gastos para las familias se han hundido casi un 60% en el último lustro y no significa más que 4,4 euros de media anual. También se intenta imprimir ya el mínimo de documentos posibles: esa partida ha bajado un 61%, hasta quedar en algo más de tres euros.

La mayor caída porcentual, sin embargo, corresponde al negocio del alquiler de televisores o vídeos, que se ha reducido un 65%.

En libros no de texto y la prensa se percibe tanto la caída de las rentas como el efecto del acceso a los contenidos a través de la Red: mientras los primeros han bajado un 35% en los últimos cinco años, la prensa desciende casi el 40%.