Los padres de una mujer en coma logran divorciarla

El Tribunal Supremo ha avalado la legitimidad de los padres de una mujer que quedó en coma a raíz de un accidente de tráfico a solicitar, como tutores suyos, el divorcio de su esposo, que le fue concedido al comprobar que antes del accidente existía "un cierto desafecto entre los cónyuges". Ella había pedido asesoramiento a un abogado sobre el procedimiento de separación.

Ya en 2008 la Audiencia Provincial de Álava estableció que "los tutores están legitimados para ejercitar la acción". "No sería lógico que el esposo pudiera obtener el divorcio en cualquier momento y que no pueda solicitarlo la esposa a través de sus tutores", estableció la Audiencia.

El marido se opuso al divorcio alegando que los padres de su mujer carecían de poder para instar el procedimiento, aunque apoyó la disolución de la sociedad de gananciales matrimoniales, lo que le fue concedido. Poco después, los padres solicitaron la separación de los cónyuges y su petición fue estimada. Pero el marido interpuso recurso, lo que llevó el caso al Supremo.

La mujer, Raquel M. N., contrajo matrimonio con Miguel Ángel S. G. en 1998 y no tuvieron hijos. Casi dos años después, el 11 de marzo de 2000, sufrió un accidente de tráfico que la dejó tetrapléjica y en estado de coma. En un primer momento, le fue concedida la tutela a su marido, pero finalmente recayó en sus padres "por razón de su mayor disponibilidad para hacerse cargo" de ella.

El Tribunal Supremo ha dictaminado ahora que, a raíz de la modificación de la Ley del Divorcio en 2005, no es necesario alegar una causa que lo motive.