Nissan ve posible recuperar la furgoneta para Barcelona

Los nervios están a flor de piel en la planta de Nissan de la Zona Franca de Barcelona. Los trabajadores deben votar mañana si aceptan cambios en su convenio colectivo para rebajar costes y poder volver a optar a fabricar la nueva furgoneta de la marca japonesa para toda Europa. La dirección de la planta confía en que los empleados aceptarán ajustar sus condiciones. Si lo hacen, los directivos ven oportunidades para ser elegidos.

"La nueva propuesta es muy competitiva. Creemos que supondrá un gran impacto", opinó Frank Torres, subdirector general de Nissan Motor Ibérica. Si el resultado de la asamblea es favorable y el comité de empresa lo ratifica (CC OO está en contra, mientras que USOC y UGT lo apoyan), la propuesta irá a Japón. No es el ajuste que pedía la dirección en enero, según explicó ayer Torres, sino una propuesta pactada con UGT, USOC y el Ministerio de Industria. En lugar de congelación de sueldos hasta 2014, se trataría de una congelación en 2012 y una progresiva subida. A cambio, se compensaría con rebajas en el pago de bajas, más flexibilidad de horarios y productividad. "Es un plan potente", confía Torres. Aunque salga adelante, no estará todo ganado. "El jueves podrían llevarse la camioneta a Marruecos, Sudáfrica u otro sitio de Europa", advierte el directivo.