Ciutadans aguanta el tipo pero no consigue grupo propio

A Ciutadans le esperan cuatro años más de oposición en el grupo mixto. Aunque aspiraba a conquistar un grupo parlamentario con sus cinco escaños, tendrá que conformarse con tres, los mismo de 2006. Según su presidente y número uno, Albert Rivera, han conseguido casi 110.000 votos. Les han faltado 1.500 para un cuarto diputado. Compartirán grupo mixto con el partido más alejado de sus ideales, Solidaritat Catalana. Todo un laboratorio de convivencia.

En las elecciones al Parlamento de 2006 Ciutadans dio el campanazo ondeando la bandera del bilingüismo y en contra de la enseñanza mayoritaria en catalán. Rivera pidió esta vez más esfuerzos, para lograr un grupo propio que le permitiera llevar adelante proyectos de ley. Según Rivera, no pactarán con nadie. "No estamos en venta", sentenció. A pesar de haber crecido en todas las provincias, tendrán que conformarse con tratar de hacerse escuchar a golpe de alegaciones. Los militantes reconocían que mantenerse es un logro, teniendo en cuenta los capítulos de desavenencias internas que ha vivido el partido.